‘Tenía nervios, no quería ser la primera, pero me tocó’, dice María de los Ángeles Barrón Padilla

Para ella el 2020 fue un año para el olvido, porque no solo la ha pasado encerrada desde entonces, sino porque perdió un hermano

ESCUINAPA._ Con emociones encontradas de alegría y temor, es como María de los Ángeles Barrón Padilla se convirtió en la primera habitante de la cabecera municipal en recibir la vacuna contra el Covid-19.

“Tenía nervios, no quería ser la primera, pero me tocó, me siento de maravilla, gracias a Dios, es una bendición de Dios la vacuna, que todo mundo se vacune”, dijo María de los Ángeles, de 66 años.

Durante el año que tiene la pandemia estuvo en casa, encerrada, una de sus hermanas le llevaba lo que requería, mandado, todo lo que necesitara, apoyada otras veces por sus vecinos, manifestó.

Fue un año triste no solo por estar encerrada, sino porque perdió a un hermano, pero no dudó en acudir a ponerse la vacuna y les pide a los adultos mayores que lo hagan.

Ramona Gallardo Salas fue la tercera persona en recibir la dosis Covid-19 en la sede de la escuela José G. Gutiérrez, y se quiso ir antes de que culminaran los 30 minutos de estar en observación.

“Me siento muy bien, lo que quiero es llegar a casa y bañarme, vine muy animada y primero Dios estaré bien, fui la número tres” señaló, mientras explica a otros compañeros lo que fue recibir la vacuna.

Otros adultos mayores le hacen preguntas de qué se siente, pero ella solo quiere llegar a casa, bañarse y está lista para volver a esa vida normal después, cuando la segunda dosis llegue.