40 años viviendo el cine: Óscar Blancarte

Héctor Guardado
10 noviembre 2015

"La educación visual y el amor por la cinematografía del director mazatleco nacieron entre las butacas de los cines Ángela Peralta, Reforma y Zaragoza"

La vida de Óscar Blancarte ha girado alrededor del cine, sus mejores recuerdos, sus amores, están marcados por el séptimo arte.
La educación visual y el amor por la cinematografía del director nacieron entre las butacas de los cines Ángela Peralta, Reforma y Zaragoza, a finales de los años 50 y en los 60, cuando ir a las legendarias salas de proyección porteñas permitía a los mazatlecos soñar con otros mundos.
"Éramos una palomilla la que nos reuníamos para ir al cine, pero yo era obsesivo, quería vivir en el cine desde niño, en ese tiempo tuvimos mucha suerte de que se programaran tan buenas películas en las salas del puerto", comenta Blancarte, quien acaba de recibir el premio Sinaloa de las Artes.
"Me tocó vivir la mejor época del cine italiano, todos los cinéfilos admirábamos a Vittorio de Sica, Fellini, Antonioni, Rossellini y soñábamos hacer películas como Ocho y medio, de Fellini, o La Dolce Vita, fue muy emocionante ver en funciones de dos por uno y tres por uno filmes como El esqueleto de la señora Morales, En la palma de tu mano, Enamorada. Era muy excitante ir al cine en ese momento, ahí descubríamos el mundo".
Recuerda que una vez en una función de tres por uno vio la trilogía Nosotros los pobres, Ustedes los ricos y Pepe El Toro.
"Durante esas casi ocho horas de estar viendo a Pedro Infante descubrí el gran actor que fue, porque antes de ese curso intensivo había visto películas donde se ve su talento en la comedia. Cuando vi la trilogía cambió mi concepto de Infante como actor", comenta.
"Cuando estrenaron en el cine Zaragoza La Dolce Vita, la pasaron en la función de las 10:00 de la noche, porque la consideraban una película pecaminosa, y no nos dejaron entrar, la tuve que ver en la Ciudad de México. De Fellini vimos en Mazatlán Ocho y medio. Pero pudimos gozar de películas clásicas, como Lo que el viento se llevó, Cantando bajo la lluvia, en el Cine Zaragoza, el Reforma, el Ángel Flores, el Tropical y el Royal".
Blancarte tiene muy claro el momento en que decidió ser director de cine.
"Tenía 13 años, no me perdía ni un número de la revista Cinelandia, además de ir casi todos los días al cine a principios de los años 60. Esa publicación traía fotografías de artistas de cine, venían reseñas de la muestra de cine de Acapulco y de los festivales del mundo, entrevistas con directores, leyéndola me quedó claro que los realizadores cinematográficos eran personas que narraban historias con imágenes y que era una profesión respetable. En ese momento decidí que iba a ser director de cine", dice.
Su sello personal
A 40 años de haber filmado su primer corto, Llanto de gaviota (1971), Blancarte hace una valoración de su estilo.
"He jugado mucho con el cine intimista, algunas de mis películas son historias de secretos de familia o conflictos personales, como Entre la tarde y la noche y Dulces compañías, también hice un cine jocoso, como Que me maten de una vez, que tiene mucho que ver con la forma en que se hacia el Neorrealismo italiano", apuntó el realizador.
Reveló que este año filmará su próxima cinta, Princesa.
"Es algo que viví cuando era muy joven en 1968. Trata sobre la relación de unos jóvenes estudiantes de provincia y la relación de amistad y solidaridad que entablan con unas ancianas aristócratas. Sucede en la Colonia Roma de la Ciudad de México", menciona Blancarte.

"Mi gran tesoro como cineasta está en las historias que se desarrollan en Sinaloa, como lo que hice en
'El Jinete de la Divina Providencia' o en el documental 'Voces corales de mi pueblo', sobre la lectura de
'Cien años de soledad' que hizo la comunidad sinaloense de El Recoveco".

Óscar Blancarte Director de cine

PREMIADO
La semana pasada, Óscar Blancarte recibió en Culiacán el Premio Sinaloa de las Artes, reconocimiento que han obtenido Jaime Labastida, Antonio López Sáenz, Antonio Haas y Enrique Patrón de Rueda, entre otros.