De la industrialización al videojuego, habla la obra de Mario Belta y Alejandro Castañeda

Nelly Sánchez
06 febrero 2021

"Los artistas participan en Estudio Abierto, de la Galería de Arte Antonio López Sáenz"

Los artistas visuales emergentes Mario Belta y Alejandro Castañeda encuentran en la Galería de Arte Antonio López Sáenz un espacio para mostrar sus intereses y preocupaciones: las problemáticas surgidas con la industrialización y los videojuegos.

Los artistas sostuvieron un encuentro para hablar de sus series “Deconstrucción: Travestismo en los mundos digitales”, de Belta e “Iconos anónimos”, de Castañeda, dentro del Festival de Primavera 2021 organizado por el Instituto Sinaloense de Cultura.

Desde la GAALS, Alejandra Larrondo, jefa del departamento de Artes Visuales, dio la bienvenida a los artistas.

Comentó que el programa surgió fin de que los artistas entablaran un diálogo con el público, y actualmente se lleva a cabo a través de las redes sociales, por la contingencia sanitaria derivada del Covid-19.

Belta, que expone autorretratos en los que desarma y rearma en forma digital su propia imagen, explicó que su obra parte de la fantasía, para ver este mundo utópico con una atmósfera mágica y usar el cuerpo como instrumento.

"Yo hablo de desconstruir mi cuerpo físico para articular una apriencia digital, depende de mis emociones o lo que quiera expresar, es como un videojuego".

Su obra se caracteriza por ser principalmente de autorretratos y suele publicarlas en Instagram.

Ahora tener las paredes de una galería para exponer le hizo sentir una especie de "performance".

"Es un tipo de performance, salirme de este cuerpo y ponerme en la pared, por eso esta ropa, es como desvanecerme".

Uno de los videojuegos que más le han inspirado en su proceso creativo, compartió, es Zelda, porque está lleno de aventuras y reinos salvajes.

Alejandro Castañeda, que aborda las problemáticas y sucesos en México a partir de la industrialización y la comercialización, su influencia y consecuencias, quiso experimentar nuevas técnicas, como la instalación.

 

Para ese análisis creó una narrativa, usando objetos cotidiandos, pues considera que tienen un valor histórico y cultural.

"Por eso lo llamó íconos, están en la casa, el patio, en la tienda, un lenguaje a través de objetos. Son tres instalaciones y una pintura con objetos o materiales en las que se tocan las consecuencias de la industrialización"

Ambos coincidieron que estar en la GAALS una grata experiencia y fuerte impulso a su labor como creadores, el ser seleccionados y participar con exposiciones en el programa.