El pescado, símbolo de los cristianos
Comúnmente la imagen de los apóstoles acompañando a Jesús se tiene como la de un grupo de pescadores que le seguían, pero esto es inexacto, pues solo cuatro de ellos ejercían esa profesión, esto se debe a estos cuatro vivían en las cercanías de Cafarnaúm y de las riveras del Lago de Tiberiades o Mar de las Tempestades.
Ciertamente esto cuatro, que eran dos pares de hermanos, se les ve en momentos señalados como importantes en la narración del mensaje evangélico.
Las escenas narradas con ellos nos muestran a un Jesús acompañándolos e incluso haciendo analogías entre a enseñanza de su doctrina y el oficio de la pesca
La labor del pescador se convirtió, de esta manera, en un símbolo que identificaba a los cristianos en los primeros siglos de la iglesia, hasta que la cruz se oficializó, cuando Constantino el Grande tuvo aquella legendaria visión de una cruz, junto al mensaje; “Con este signo vencerás”.
A partir de entonces el signo de la cruz se generalizó en todo el Imperio Romano. En el año 150 san Clemente de Alejandría, refiriéndose a el símbolo de la cruz hace una referencia respecto al símbolo del pez, lo cual da a entender que este signo era ya usado comúnmente en ese tiempo como una referencia de identificación entre los cristianos,
La palabra para designar al pescado en griego, el idioma hablado junto al latín esa época, se Elia así; ICHTHYS, el cual era usado como un acróstico cuya interpretación letra por letra era este: I=Iesous (Jesús); Ch=Christos (Cristo); Th=Theou (Dios); Y=Yios (Hijo); S=Soter (Salvador).
La alusión al pez hacía referencia, sin duda, a los pasajes bíblicos, cuando Jesús acompañaba a sus discípulos en momentos de pesca. En estos pasajes este hace referencia a la multiplicación de los peces, también cuando Jesús dio de comer a una multitud con cinco panes y dos pescados o cuando después de la pesca milagrosa, el apóstol Pedro exclamo; “Apártate de mí Señor porque soy un pecador”, ante lo cual el Señor le contestó, haciendo un juego de palabras, “Desde ahora serás un pescador de hombres”.
Para tertuliano su significado era que el cristiano nace del agua bautismal, por medio de la cual tiene un renacimiento para la vida eterna.
En los difíciles tiempos de las persecuciones la figura del pescado se convirtió en símbolo de identificación entre los cristianos, quienes al encontrarse se identificaban dibujando un pescado.
Abercius, en el Siglo II asocia el símbolo del pescado a su experiencia, cuando visito Roma y le ofrecieron un alimento consistente en un pez, junto al pan y al vino.
Después del Siglo IV disminuyó el pez como símbolo del cristianismo, al ser suplido con el de la cruz, pero actualmente hay un movimiento de fe que lo retoma, convirtiéndolo como un compromiso de vivir el cristianismo bajo el ya ancestral símbolo del pescado