Expresiones de la Ciudad: El ninguneo de Jesús Valdés

Julio Bernal
17 julio 2017

"."

El fin de semana que se acaba de ir, Leticia Santos subió unas fotos a Facebook en las que preside la primera reunión del comité, o como se llame, que el presidente Jesús Valdés se inventó dizque para ciudadanizar la programación de festejos por el aniversario de Culiacán, en septiembre próximo.Y digo que “se inventó” porque, a como veo el asunto a estas alturas del partido, dicho comité ofrece la finta de la ocurrencia, pero al mismo tiempo le dio una oportunidad políticamente aprovechable: la de aparecerse como un edil que gobierna con la gente, que no nada más la escucha para tomar decisiones, sino que además la incluye con formatos como este que le digo, pero que yo resumo como figura de ornato que en su momento le sirvió para hacerse la foto, de tal modo que medio cristo a la redonda, particularmente la comunidad cultural, le lanzara vítores a su eminencia el Presidente. Yo me la creí cuando supe su idea de nombrar a la profesora Alicia Montaño como presidenta del consabido comité, y hasta me tocó ver una foto de ella, a un lado del mismísimo Jesús Valdés, algo así como tomándole protesta a otros respetables ciudadanos que fueron incluidos.  Pero acabo de mirar las imágenes que Leticia Santos subió a Facebook y descubro que es ella, acompañada de parte de su equipo, quien tiene la batuta del mando en esa primera reunión, mientras que Alicia Montaño está allá, sentada al fondo, como si nada más observara la escena, y determino que la profesora bajo ninguna circunstancia se merecía eso, y determino que qué Presidente tan determinado tenemos, pues cómo es eso de que se atribuya el derecho de ningunear a una figura tan querida y respetada como Alicia. Y conste que lo digo yo y que me hago consecuente de mis actos, con lo que quiero decir, y digo, que son mis apreciaciones personales, pues es público y conocido que Alicia Montaño es una mujer generosa y solidaria, quien seguramente aceptó gustosa la invitación que le corrió Jesús Valdés; y que cuando se vieron, ella no lo nombró como Jesús, o como el Chuy, sino que a pie enjuto le dijo sí, cómo no: para servirle, señor Presidente, porque Alicia es una mujer respetuosa y es también una militante priista disciplinada, incapaz de contradecir o evidenciar al primer edil de Culiacán, emanado de su mismo partido político. Entonces soy yo el que digo que Jesús Valdés nos volvió a jugar el dedo en la boca a muchos, porque además no solamente para ese comité tenía planeado invitar a Alicia Montaño, pero este es un tema que no hago público porque es muy poco ético hablar de conversaciones privadas, así que me lo guardo y punto. Pero lo que no me puedo guardar es la impotencia, lo que no puedo dejar de decir es que se nos ha configurado un Jesús Valdés que hace que escucha y hace que decide, pero que ni en verdad escucha y ni tampoco toma las decisiones que promete, al menos en el ámbito de la cultura. Todo indica que ello es nada más estrategia suya, que es un político que aprendió muy bien a darle largas a cualquier asunto problemático, o al menos hasta que la gente olvide sus reyertas. Pero el Presidente olvida que lo que se anida, en algún momento habrá de revivir; o como diría don Cuco Sánchez: arrieros somos y en el camino andamos. Mientras tanto, habrá de seguirse viendo a Jesús Valdés haciéndole reverencias a Enrique Patrón de Rueda, no tanto porque le guste la música académica, sino porque le tiene miedo. Y punto.

Comentarios: expresionesdelaciudad@hotmail.com