Gran velada con ‘Arias de concurso’, brindan miembros del Taller de Ópera

Noroeste/Redacción
19 mayo 2022

En una pasarela de talento, ofrecieron las arias más selectas para convencer al mejor jurado

Con el selecto programa Arias de concurso, los miembros del Taller de Ópera de Sinaloa del Instituto Sinaloense de Cultura participaron en un imaginario concurso de canto lírico, en el Teatro Socorro Astol de esta capital, donde como siempre, dieron muestra de todo su talento y sus dotes interpretativas, como para ganar un concurso.

Con el acompañamiento al piano de Zlatina Valkova y Rodrigo Ilizaliturri, y bajo la dirección artística de José Manuel Chu, y vestidos con sus mejores galas, abrió la velada Ángel Vázquez (de Culiacán), con un aria de la ópera Cosi Fan Tutte, de Amadeus Mozart, titulada Un’ aura amorosa, que provocó las primeras muestras de entusiasmo; para continuar la mezzosoprano colombiana, Ángela Velandia con el aria Va! Laisse couler mes larmes, de Werther, de Jules Massenet, también muy aplaudida.

Luego pasó al frente la mezzo Gabriela Zazueta (de Culiacán), que impresionó gratamente con la interpretación de The trees on the mountains, de la ópera Susannah, de Carlisle Floyd, y entre las más aplaudidas, la ultra conocida La donna è mobile, de Rigoletto, de Giuseppe Verdi, en la voz vigorosa del tenor Alan Herrera (de Culiacán).

Y una de Turandot, a cargo de la soprano Claudia Puebla (de Guamúchil, Sin.), que interpretó Tu che di gel sei cinta, de Puccini, con la que recibió intensos aplausos, mientras que el tenor Mario Canela (de Tijuana, B.C.), cantó muy bien Nel fragor della festa, de la ópera María De Rohan, de Gaetano Donizetti.

De Los Cuentos de Hoffmann, de Jacques Offenbach, la soprano culichi Jessica Torrero ofreció una aplaudida interpretación del aria Les oiseaux dans la charmille (la de la muñeca de cuerda), y el barítono Carlos Rojas (de Mazatlán) interpretó el Voilà donc la terrible cité, de la ópera Thaïs, de Jules Massenet, mientras que, de Turandot, la soprano mazatleca Lucía Beyles cantó “Signore, ascolta!”, de Giacommo Puccini.

El tenor Jair Padilla (de León, Guanajuato), dio su timbrada voz al aria Dies bildnis ist bezaubernd Schön, de La Flauta Mágica, de Mozart, y la mezzosoprano Mayela Yépiz (de Monterrey) cantó Acerba voluttà, de la ópera Adriana Lecouvreur, de Francesco Cilea.

Otra muy típica de los grandes concursos con la que suelen lucirse los barítonos, la cantó Isaac Herrera (de Hermosillo), con el conocido Largo al factótum, de Il Barbiere di Siviglia, de Gioachino Rossini.

Posteriormente, la soprano Zulema Vergara (de Zihuatanejo, Guerrero), interpretó en este imaginario concurso, el aria Senza mamma, de la ópera Suor Angelica, de Puccini, y el tenor Alexander Torres (de Mazatlán) puso todo su empeño por hacerse del triunfo con la pieza E lucevan le stelle, de la ópera Tosca, de Puccini, en la que la sorpresa fue la participación del joven clarinetista sinaloense Erick M. Castro acompañándolo con su instrumento, junto con la maestra Valkova en el piano.

Cerraron con una pieza extra, todos juntos, interpretando la hermosa pieza coral Va pensiero, de la ópera Nabucco, de Verdi, que como siempre, provocó cerrados aplausos y entusiastas ovaciones de los asistentes.

El 3 de junio la cita es en el Teatro Pablo de Villavicencio con la ópera completa Elíxir de amor, de Donizetti, con acompañamiento de la Orquesta Sinfónica Sinaloa de las Artes, invitó al final el tenor José Manuel Chu, director del taller.