Isaac Hernández construye su libertad desde la disciplina y el rigor
"El famoso bailarín mexicano de ballet clásico brinda gratuitamente una master class en redes sociales"
Isaac Hernández, considerado uno de los mejores bailarines del mundo, ofreció la master class Cada paso cuenta, a través de las redes sociales de Citibanamex.
Ganador del premio Benois de la danse que otorga la Asociación Internacional de Danza de Moscú al mejor bailarín del mundo, actualmente es primer bailarín del English National Ballet,
Más de 10 mil seguidores tomaron la clase de ballet básico que duró dos horas y que ofreció la estrella de la danza, que aseguró que para él ha sido muy importante tener claro todo el proceso técnico que consigue que un ser humano se convierta en un bailarín profesional, por esa razón su clase ofreció luces para quienes estudian ballet y para los espectadores de ese arte sobre la filosofía con la que se construye esta disciplina.
Una de las afirmaciones más importantes que declaró en esta clase el afamado bailarín fue que la disciplina y el rigor son las que construyen la libertad en el ballet, cada uno de los momentos de sus clases estuvo orientado hacia esa afirmación y lo recalcó de diferentes maneras.
Lo importante es que esa filosofía del ballet puede ser aplicada a la vida de las personas, en cualquier profesión o actividad la disciplina y el rigor es lo que permite desarrollarse con libertad y sin dudas en cualquier trabajo que realices.
“En cada clase de ballet hay que desarrollar al máximo para construir el cuerpo y conseguir libertad al momento de estar interpretando en el escenario, cada paso que practicamos en una clase de danza debe llegar al máximo esfuerzo y mantener en un constante estado de alerta al cuerpo”, compartió.
“En el ballet como en la vida no hay un momento estático, siempre hay tensión en el cuerpo, eso lo mantiene estirado en el eje listo, expectante, para responder a cualquier estimulo o imprevisto”.
Vestido con una camiseta café un pants negro, ofreció una clase cargada de su energía que contagió a sus miles de seguidores, utilizó música de las óperas La Traviata, Cosi fan tutte, Romeo y Julieta, el tango El Choclo y compases especiales para clases de ballet tocados al piano.
“El acento es que corona cada movimiento y lo define el ritmo, ese elemento nos habla de la musicalidad del bailarín y seduce al público que observa que la música se materializa en los movimientos”.
Paso a paso, Isaac Hernández fue explicando desde los más sencillos ejercicios: plié, relevé, tendu y fue explicando cómo la secuencia de esos movimientos van armando las frases coreográficas con las que se construyen los ballet y también las clases diarias en las que se repiten una y otra vez esos ejercicios van construyendo el cuerpo del bailarín que se convierte en un instrumento para comunicar a través de una obra.
“Cada clase va construyendo el cuerpo en un proceso que le permite al bailarín ir desarrollando un instinto que le permite expresar y resolver en el momento que está en el escenario ahí no existe lugar para la duda, el dominio de la técnica te permite no dudar, eso es lo que hace a un bailarín un profesional”.
Finalizó su clase contestando preguntas, dijo que el ballet lo debes hacer para encontrar felicidad, lograr estar dentro de tu cuerpo para crecer y fortalecer tu voluntad.