Leonardo y Miguel Ángel, genios y rivales

EFE
09 noviembre 2015

"En los Museos Capitolinos de Roma se muestran obras maestras, gráficas y estudios"

ROMA (EFE)._ Rivalidad y genialidad son los temas de la exposición en torno de Leonardo da Vinci (1452-1519) y Miguel Ángel Buonarotti (1475-1564) abierta en los Museos Capitolinos bajo el título Leonardo y Miguel Ángel: Obras Maestras Gráficas y Estudios Romanos.
Los dos grandes e influyentes genios del Renacimiento no eran tan distintos, como pretende probar esta muestra que presenta dibujos, ilustraciones y textos de ambos humanistas extraídos de los archivos de la casa familiar de los Buonarotti en Florencia (museo desde 1858) y de la Biblioteca Ambrosiana de Milán.
Genialidad y rivalidad que se pone de manifiesto en las salas del romano palacio Cafarelli y que articulan un recorrido centrado, en primera instancia, en sus obras maestras.
En la primera parte están los bocetos visionarios de Leonardo (sobre catapultas, morteros, máquinas de prospección, murallas o anatomía) y los dibujos, las ilustraciones, los sonetos de Miguel Ángel.
Esto deja constancia de la variedad de disciplinas que ambos artistas trataron y de sus similares inquietudes, a pesar de los 23 años y de las circunstancias personales y vitales que los separaron.
Se hace hincapié en la pasión que compartieron por lo clásico: Leonardo desde una perspectiva respetuosa ("Imita cuanto puedas a los griegos y los latinos", solía decir); Miguel Ángel desde una visión profana, misteriosa, críptica.
Se exponen los 26 fragmentos del Código Atlántico, la monumental selección de dibujos y escritos de Leonardo, que se ven por primera vez fuera de la Biblioteca Ambrosiana. Y es también el momento de los cuadernos de viaje en Villa Adriana, del Leonardo geómetra, óptico, del Miguel Ángel ebanista, escultor, del responsable de la Capilla Sixtina.
Un recorrido en el que se aprecia la minuciosidad del "joven" Miguel Ángel en los estudios a las pinturas de la Capilla Sixtina, que adornó durante cuatro años, así como el grado de aplicación del "viejo" Leonardo y la magia de su escritura invertida, sólo apta para espejos.

LA EXPOSICIÓN La muestra puede ser visitada a diario en uno de los escenarios más "miguelangelescos" de la urbe romana, la plaza del Capitolio, donde se alza el ayuntamiento. La misma plaza que Miguel Angel proyectó en los últimos años de vida.