Llena la Oda, de alegría

Nelly Sánchez
08 noviembre 2015

"La Orquesta Sinfónica Sinaloa de las Artes concluye la temporada SAS-Isic con la espectacular 'Novena Sinfonía', de Beethoven"

CULIACÁN._En el año 2000, la entonces Orquesta Sinaloa de las Artes tocó por primera vez para los sinaloenses la Novena Sinfonía de Beethoven, en la Catedral Basílica de Nuestra Señora del Rosario, con muy mala acústica. Ahora, a 10 años de distancia y convertida en Sinfónica, la OSSLA la trajo de nuevo a los sinaloenses, esta vez en todo su esplendor.
Esta vez bajo el altar de la Virgen de Guadalupe, en el templo de La Lomita y ante cientos de espectadores, la Orquesta Sinfónica Sinaloa de las Artes, dirigida por Gordon Campbell, concluyó la temporada anual de la Sociedad Artística Sinaloense e Instituto Sinaloense de Cultura, y a su vez la Temporada de Otoño, con la quizás más trascendente obra de Ludwig Van Beethoven y la más popular en toda la historia de la música.
Su final coral, está inspirado en el poema de Friedrich Schiller, y es un símbolo de alegría y libertad, lo interpretaron en su idioma original los cuatro solistas, María Luisa Tamez, Conchita Julián, Arturo Barrera y Ángel Ruz, y las 34 voces del coro de Ópera de Sinaloa.
Luego del primer movimiento, Alegro ma non tropo, a eso de las 9 de la noche, el campanario del templo centenario comenzó a sonar y una grabación de La guadalupana provocó una pausa en la Novena, al final el público lo aplaudió y los músicos siguieron en el segundo movimiento, Molto vivace, uno de los más conocidos.
El público siguió aplaudiendo entre uno y otro movimiento, Adagio molto e cantabilie, Presto, presto O freunde, nicht dieste töne, llenos de matices y texturas majestuosas, que la Ossla puso a la obra que Beethoven estrenó en 1824, en el teatro de la Corte Imperial de Viena.
Al llegar al final, el más esperado cuando el grave sonido de los contrabajos y los violonchelos se escucharon, al que se sumaron las violas, los violines y luego toda la orquesta, se escuchó ese canto gozoso, lleno de júbilo y esperanza, la Oda a la alegría, la grandeza de la Novena Sinfonía, se sintió en la piel de los sinaloenses.
Y esa felicidad, que no se pudo contener a lo largo de la obra, la volvieron a manifestar de pie, con prolongados, haciendo regresar a músicos y cantantes, para interpretar, ahora, una serie de tradicionales villancicos.


TEMPORADA DE OTOÑO
Con la Novena Sinfonía de Beethoven, la OSSSLA concluyó además la Temporada de Otoño, durante la cual interpretó las nueve obras sinfónicas del músico alemán.