Promueven a El Palmar como sitio turístico
10 noviembre 2015
"El lugar alberga un conjunto de cascadas a lo largo del río Salado"
EL PALMAR, Chiapas(UNIV)._ Aquí la conciencia ecológica y compromiso con la naturaleza son una realidad. En El Palmar, campesinos y lugareños resguardan desde hace años la biodiversidad de esta zona, una superficie de 15 hectáreas que alberga un conjunto de cascadas a lo largo del río Salado en el municipio de Totolapa (río de las aves, en lengua zoque) de la región Centro de Chiapas.La riqueza de fauna y flora se extiende en un paisaje de aguas majestuosas y el verdor de valles y montañas.
El Palmar es reducto natural de especies endémicas y en riesgo de extinción, tales como águila real, tepezcuintle y armadillo, reptiles, aves y diversas mariposas. También se reproducen plantas curativas como el árnica, guarumbo y cañafistola.
Familia ambientalista
El cuidado y preservación de El Palmar lo inició hace 80 años don Ernesto, el fallecido abuelo de Pedro Edilberto López Rodríguez, quien con su familia mantiene la tradición de salvaguardar el sitio.
La familia López, parientes y amigos trabajan en la conservación del ecosistema mediante labores de siembra de árboles frutales y cítricos, fertilización de suelos, riego y vados para evitar la desertización de las superficies.
"El Palmar es nuestra casa", afirma don Pedro Edilberto. "Lo cuidamos, y estas cascadas verde-turquesa son espacio de encuentros; convivimos con otras familias, con visitantes y turistas que acuden cada fin de semana", señala.
En los últimos cuatro años las cascadas (entre las que destaca El Chorro) y lagunas se transformaron en un balneario y centro recreativo, pese a la falta de instalaciones y caminos adecuados para acceder sin contratiempos.
El Palmar está en las afueras de la cabecera de Totolapa, en la confluencia del altiplano central y de la depresión central, a 90 kilómetros al oriente de Tuxtla Gutiérrez.
Atractivo turístico
Las cascadas son un universo de biodiversidad; sin embargo, no figuran en los destinos turísticos de la región ni tienen promoción institucional de dependencias gubernamentales del ramo, como ocurre con El Chiflón o los Baños del Carmen, de los municipios cercanos de Scolotenango y Venustiano Carranza, donde mediante promocionales y guías turísticas se difunden constantemente.
Al atractivo turístico de Los Chorros, de esta demarcación de origen prehispánico, se añaden las fiestas religiosas, las danzas y tradiciones que reflejan las costumbres ancestrales. Destacan las ruinas adjuntas del templo de San Dionisio, que datan de finales del Siglo 19.
Las celebraciones más importantes de este municipio dedicado a la agricultura, ganadería, pesca y comercio son las de La Asunción y la de San Dionisio, así como la de Santa Cruz, la Concepción, el nacimiento del Niño de Santa Rosa y del Niño Florero, y San Antonio.
El reto actual de los lugareños es conseguir recursos financieros para construir infraestructuras turísticas dignas para recibir a los visitantes.
Don Pedro, conocido como "el guardador de las cascadas", destaca los anhelos de la comunidad hacia la creación de un proyecto de turismo ambiental sustentable, como ya se practica en los pueblos lacandón, chol, tojolabal y zoque de las regiones Selva, Altos y Norte de Chiapas.
"Buscamos la alternativa ecológica para disponer de baños biodigestores, palapas y cabañas, todo en armonía con la naturaleza, sin perjudicarla", explica.
Aquí, puntualiza, se puede realizar senderismo, fogatas, paseos a caballo, tirolesa, pernocta y recorridos para admirar y disfrutar de la riqueza de la fauna y flora.
José Luis es agricultor en uno de los terrenos de las inmediaciones. Se queja de la falta de oportunidades económicas alternas y anhela ser guía de turismo ambiental.
"Tengo mis dos caballitos con los cuales podría llevar a los visitantes a recorrer los lugares, sólo necesitamos el apoyo para construir senderos y rutas adecuadas".
Por ahora, los paseantes llegan de municipios vecinos y de otras regiones del estado.