Sorprende Proporción áurea

Nelly Sánchez
15 noviembre 2015

"Autoridades del Isic y del Centro de Ciencias inauguran la exposición que se exhibirá durante dos meses en la planta alta del Museo de Arte de Sinaloa"

CULIACÁN._ La forma de los pétalos de una flor, de un átomo, un caracol, una telaraña, un huracán y hasta una constelación, no es azarosa, tiene que ver con una proporción matemática que la hace bella a nuestros ojos. 

Es la proporción áurea y está presente prácticamente en todo, desde tiempos remotos, en el arte y en la vida cotidiana. 

Y esto se muestra en la exposición Proporción áurea, una mirada a la ciencia a través del arte, inaugurada en el Museo de Arte de Sinaloa. 

La exposición se divide en cuatro núcleos temáticos, en los que se ilustra su presencia a través del tiempo, en los ritmos y proporciones de la naturaleza, en el equilibrio y armonía de las obras de arte, así como en la vida cotidiana. 

Cientos de personas, entre los cuales había muchos jóvenes, adolescentes y niños, se sumaron a la inauguración, recorrieron la muestra, se asombraron con videos, maquetas, reproducciones de obras de arte en pintura, arquitectura y escultura en la que explica la influencia matemática en su equilibrio y belleza, desde los primeros filósofos, matemáticos y artistas de la antigua Grecia hasta nuestros días. 

En tiempos antiguos, el hombre se preguntaba la razón de esta belleza y en esa búsqueda de respuestas llegaron a la Proporción áurea. Pitágoras, primer matemático puro, eligió como símbolo para su escuela, la estrella pentagonal que muestra todas sus relaciones con la sección áurea, Platón desarrolló de teoremas relacionados con este temas y Phidias, escultor que colaboró en el embellicimiento del Partenon, fijó la primer letra griega conocida como razón áurea. 

Pero fue Fibonacci el primero en encontrar metódicamente la relación entre las dos representaciones de la proporción área y la geometría numérica. 

En la naturaleza, esta proporción se observa en los pétalos de una flor, un caracol, hasta un ciclón, una telaraña y una constelación. En el cuerpo humano, ilustran, una asombrosa precisión entre cada una de sus partes. 

Y en la vida cotidiana, está presente en lo que menos se puede imaginar, como las tarjetas de crédito y los billetes. 

En el arte, no sólo influye el estado emocional y creativo del artista. En la arquitectura son un proceso racional de cálculo y planeación; en la música, se usa el principio pitagórico de armonía. 

Algunos poetas, se han ocupado del tema también, como Rafael Alberti, quien forma parte de esta exposición con el Soneto a la Divina Proporción. 

En la inauguración, María Luisa Miranda Monrreal, directora general del Instituto Sinaloense de Cultura, destacó que este es un trabajo especial, hecho por profesionales que unieron su talento e inteligencia, con un objetivo común y significativo para todos. 

Minerva Solano, directora del Masin, señaló que este material tiene el propósito de lograr la admiración y el asombro. 

"Porque el asombre es la inquietud que nos lleva a la búsqueda de una respuesta y conocimiento y nos lleve a adentrarnos en el conocimiento de las matemáticas que plantean la proporción áurea y descrifrar los secretos que les brinda a los artistas y creadores". 

Rocío Labastida, directora del Centro de Ciencias, aseguró que mientras más nos acercamos a la verdadera ciencia, también nos aproximamos al arte, pues no son áreas separadas. 

"Este proceso no inicia en un laboratorio ni taller artístico de primer mundo, sino en la capacidad de observación que el ser humano ha podido cultivar y perfeccionar gracias a su noción de belleza", dijo. 

"Lo que parece casualidad ante nuestros ojos o un mero accidente de la naturaleza, resulta ser una maravilla perfectamente organizada". 

En la inauguración participó también Priscila Rodríguez, integrante de la Sociedad de Amigos del Masin.

HORARIO La exposición estará abierta al público hasta fines de octubre, en un horario de martes a sábado de 10:00 a 18:00 horas, y domingo de 11:00 a 18:00 horas. Los lunes no se abre.