Trikis-Trakes: Un payaso sin límites
09 noviembre 2015
"El mazatleco cumplirá dos décadas de hacer sonreír a chicos y grandes"
MAZATLÁN._ Pese a que la vida parecía no sonreírle al haberse quedado sin padre cuando tenía 4 años y a llevar una infancia llena de carencias, Alfredo Flores González optó por un camino más divertido, el hacer reír a la gente convirtiéndose en payaso, Trikis-Trakes, que está a punto de celebrar dos décadas de carrera.Su singular humor para divertir a chicos y grandes lo ha convertido en uno de los payasos más emblemáticos de Mazatlán, un oficio que de pequeño él veía muy lejano.
"Para mí los payasos eran algo inalcanzable. Siempre quise tener una fiesta con un payaso, pero sabía que no se podía porque no había dinero, sólo los veía de lejos", recuerda.
Su madre tuvo que trabajar para sacarlo adelante a él y a sus siete hermanos, por lo que pronto decidió apoyar a la economía familiar y, además de estudiar, se dedicó a varios oficios.
"Vendía ciruelas, manzanas, pan; la hice de ayudante de carpintero, de albañil, de plomero. No pude terminar la preparatoria, pero me dieron reconocimiento porque sabían de mi empeño. También me metí a trabajar a la Marina", recordó.
Sus inicios
En 1992, Alfredo trabajaba en una reconocida empresa de panificación a nivel nacional, cuando surgió la oportunidad de hacer algo más que dar mantenimiento a trailers.
"Le daba mantenimiento a la maquinaria pesada, mientras hacía mi trabajo cantaba, brincaba, era muy payaso", evoca entre risas.
"En una ocasión fuimos a un evento del trabajo y llevaron a un payaso, invitó a pasar a varios niños para hacer un truco de magia y los zangoloteó de tal manera que se vio agresivo, incluso varios compañeros le quitaron a sus hijos. Después comentamos que nosotros lo hubiéramos hecho mejor que él", relató.
"Más tarde, un compañero al que le habían asignado hacerla de payaso en un depósito de pan me eligió a mí para que lo acompañara, yo me llamaba dependiendo la marca del producto que se promovía, como Panquesín o Bimbollín".
Su trabajo dentro de la empresa trascendió y no sólo en las fiestas de los hijos de sus compañeros, por lo que al llegar el recorte laboral no dudo en hacer de su nueva profesión su manera de vida.
Los sinsabores
Trikis-Trakes comenta que de niño fue muy peleonero, por eso le tiene paciencia a los pequeños que en sus fiestas se comportan muy agresivos.
"Sí me han tocado muchos niños mal portados, pero a un niño no se le debe pegar, lo que hago cuando me llegan a patear es hacerme como que lloro y decirles 'Sí me dolió'. Cuando siguen molestando y los papás no les dicen nada, entonces empiezo a decirles '¿El niño vino en taxi?, ¿no tiene papás?", indica.
"De niño fui peleonero, el que me buscaba me encontraba. Me gustaba el box, el karate, todo con lo que pudiera sacar energía, por eso puedo entender a los pequeños, pero creo que los padres deben estar más al pendiente de ellos".
Recuerda que en una ocasión, por la noche, se quedó sin gasolina en una vía poco transitada y al ir caminando a la gasolinera dos personas le ofrecieron llevarlo.
"Pero agarraron por otro camino, me empezaron a decir que me llevaban a un lugar para que hiciera reír a su jefe y a su esposa. Me dio miedo y tristeza porque les insistí mucho que tenía que llegar a trabajar en un restaurante y se negaban a bajarme, hasta que me dijeron: 'Bájate pues payaso llorón, a la otra no vamos a tener compasión de ti'. Y me soltaron".
La otra cara de un payaso
Aunque su profesión implica tener un habitual ritmo de alegría, eso no quiere decir que Trikis-Trakes no tenga momentos de tristeza.
"Los payasos no podemos darnos el lujo de que nos vean tristes, nuestra misión siempre es hacer reír a los demás. En una ocasión traía muchos problemas, llegué a una fiesta y un niño se acercó y me dijo: 'Yo te conozco, no me engañas, tu vienes preocupado y triste. Mi mamá me puso como condición traerme a verte si hacía la tarea y le cumplí, no me falles, no me gusta verte así. Te voy a dar un regalo'... y me dio una envoltura de papel con un dulce. Lo guardé por mucho tiempo para recordar que, pase lo que pase, hay gente esperando que le lleves un momento de diversión".
En la profesión correcta
Aunque fue la vida quien lo llevó por el camino del humorismo, Trikis-Trakes agradece el haber encontrado el oficio que más lo llena.
"Un payaso no tiene límites, no te privas de nada, en mis otros trabajos tenía un tope, aquí soy libre, puedo caracterizar personajes, como el de la máscara, un luchador o un mimo, y puedo darles el toque que yo quiera".
A punto de cumplir dos décadas de carrera, Trikis-Trakes califica su trabajo como maravilloso.
"Mi trabajo es fantástico, y es que en la vida real así soy, trato de verle el lado positivo y divertido a las cosas. Me siento muy satisfecho de compartir momentos de alegría, especialmente con fundaciones de niños o con el Asilo de Ancianos. Yo hago mi trabajo con gusto".
20 AÑOS DE CARRERA
En 2012, Alfredo Flores González cumplirá 20 años de carrera como el payaso Trikis-Trakes.
DÍA DEL PAYASO
Hoy se celebrará el Día del Payaso en México. La comunidad mazatleca lo festejará con una misa y un desfile.