40 años con Mazinger Z
10 noviembre 2015
"Su éxito, a través de la TV de los años 70 y 80, se extendió por todo el mundo"
Corría el año 1978 cuando la serie Mazinger Z aterrizó en el mercado hispano. Primero en España y Puerto Rico, una primera toma de contacto que la propulsó en los 80 a Chile, Panamá, República Dominicana, Venezuela, El Salvador, Guatemala, Costa Rica, Bolivia, Perú, México, Argentina, Colombia, Honduras y Ecuador, dejando una huella imborrable.Aún hoy, sus seguidores en Latinoamérica son legión y mantienen vivo en internet el robot que creó el autor japonés Go Nagai en 1972, y que celebra su 40 aniversario.
El manga se lanzó en Japón en abril de ese año y la emisión televisiva comenzó el 3 de diciembre en la cadena Fuji-TV.
Prueba de la importancia de Mazinger en el mundo hispanohablante es que se llevaron a cabo tres doblajes: uno en España; el doblaje Arait (el español latino) y el doblaje Cadicy, considerado el "español neutro". Cada uno de ellos adoptó nombres propios y expresiones características, y tenían su propio reparto.
Estos son algunos de los detalles que recoge J. Aurelio Sanz-Arranz en Mazinger Z: La enciclopedia, un pormenorizado trabajo de análisis y recopilación de datos en torno a la serie y el personaje, que ha sido elaborado durante seis años.
El inicio
"Mazinger Z pertenece ya al mundo de los sueños de los niños y no le cambiaría ni una coma", afirma Go Nagai, que visitó el Salón del Cómic de Barcelona con motivo del 40 aniversario del héroe metálico.
Go Nagai ideó a Mazinger Z en su coche, medio del tráfico: un poderoso robot tripulado que volara y le sacara de allí. Comenzó a trabajar en la idea: el tripulante tenía que conducir desde la cabeza del ingenio mecánico, cuyo aspecto exterior estaba inspirado en los vaqueros del western. La cara enmascarada la sacó de las películas de criaturas mitológicas "tengu".
Así fue tomando forma este héroe de 18 metros de alto y 20 toneladas de peso, de aleación indestructible, cuyas armas más emblemáticas eran los puños cohete, los rayos fotoatómicos o los rayos congelantes.
Junto a él, nació su piloto, el joven Koji Kabuto y, claro está, sus grandes enemigos: el Doctor Infierno y su acólito, el Baron Ashler, mitad hombre y mitad mujer. Como contrapunto al héroe adolescente, surgió Sakaya Yumi, una fémina lejos del rol dócil y complaciente reservado a las mujeres. Ella pilotaba el robot Afrodita-A, en cuyos pechos se colocaron un par de misiles, uno de los grandes hitos de la serie.
"Al ser japonés, Mazinger estaba dirigida a todos los públicos, y no sólo al infantil; eso se nota en varios aspectos de la serie, más para adultos que las típicas series para niños de entonces. Los personajes muestran un desarrollo, y unos sentimientos más profundos", opina Sanz-Arranz, quien reconoce que, en su caso, "la prueba de calidad" de la serie se produjo cuando volvió a ver sus aventuras de adulto, con "ojo crítico".
"Esta era y es una serie divertida de aventuras, como otras tantas de aquella época y de ahora; tiene mucha magia. Los niños siguen disfrutando con ella, y por supuesto, no ha perdido actualidad", opina Alfredo Garrido, experto en manga.
El éxito, a su juicio, queda reflejado en las incontables entradas y reproducciones en Youtube.
¿EN CINE?
JAMES Cameron compró los derechos de "Mazinger Z" para llevarlo al cine, pero el proyecto no ha pasado de esa fase.
EN CORTO
n "Mazinger Z" nació en 1972 de la imaginación de Go Nagai.
n España y Puerto Rico fueron los primeros países hispanos que emitieron la serie por televisión, que se extendió por Latinoamérica dejando una huella imborrable.
n Una novedosa y pormenorizada enciclopedia en español recoge en dos volúmenes todos los detalles de la serie y del personaje, tras seis años de trabajo de su autor, J. Aurelio Sanz-Arranz.