Defiende Manzanero su esencia maya
07 noviembre 2015
"Armando Manzanero presenta su disco 'Ni antes ni después', en el que colabora la Big Band Jazz de México"
MÉXICO (UNIV)._ "No tengo ranchos ni casas. No tengo dinero en bancos ni tengo edificios. Pero ahorita que termine de hablar con usted, voy a comerme un bis hua; le aseguro que esa es la mayor riqueza de mi vida", señala Armando Manzanero, quien defiende su esencia, sus raíces.Bis hua es, traducido del maya, pan de maíz, maíz necesariamente tierno que se muele y se tortea hasta hacerlo un pan que se come sólo durante el verano en Yucatán y acompañado de café. Y es la mayor riqueza del cantautor porque cada vez que se sienta a comerlo, se sienta junto con él su abuela. Es decir, el recuerdo de su abuela, la mujer que le enseñó maya a través de sus leyendas.
El viaje hacia su infancia yucateca tiene un motivo: la presentación del disco Ni antes ni después, en el que colabora con la Big Band Jazz de México fundada hace cinco años por un grupo de xochimilcas amantes de las grandes bandas. Ese mismo amor siente Manzanero desde que era un niño en Yucatán y un día, un viernes para ser precisos, acudió a un concierto de la big band de Luis Arcaraz, luego de haber sido arrollado con su bicicleta por un automóvil que lo dejó tan maltrecho que la Cruz Roja lo internó por tres días.
-¿Cómo fue que estando en la clínica acudió también ese día al concierto de Alcaraz? Èl narra esta historia al final de la entrevista. Aunque no la tiene, usted pudo atesorar esa otra riqueza, la del dinero y el banco...
-Nunca se me dio atesorar. Pero lo que más he hecho y más orgullo me da es haber levantado a mi familia y mis hijos. Usted sabe que no he sido un señor muy ordenado en mi vida personal. A mí me hubiera gustado tener un solo matrimonio de toda la vida pero no pude. Y cuando ya no podía convivir con alguien me separaba; así que tuve varios matrimonios pero jamás dejé a nadie sin dinero.
- ¿Ser un enamorado empedernido es inspiración para su trabajo de compositor?
- Debía decir que sí porque indudablemente el compositor se alimenta de sus sentimientos. Pero le diría también, por ejemplo, que la canción Parece que fue ayer se la compuse a un presidente en su aniversario de bodas. Y que Nada personal la escribí con base en las frases de la telenovela de Argos. Puedo decir entonces que el oficio es tan importante como estar enamorado.
- ¿Dirá ahora que Voy a apagar la luz también la hizo por encargo?
- Le voy a contar la historia: Yo estaba en la casa de Luis Demetrio y otros compositores donde vivía de recomendado, me daban posada. Y yo quería pensar en aquella niña bonita que había conocido en un restaurante donde comíamos pero cada vez que deseaba acordarme de su perfume, Luis y sus amigos comenzaban a platicar. Yo pensé cómo puedo hacer para que se callen? y entonces se me ocurrió: 'Pues voy a apagar la luz'. Y así nació esa canción.
- Luis Demetrio murió hace dos años. ¿Qué tan fuerte es el luto por él?
-Yo estoy ahora aquí en -Ciudad de- México gracias a Luis. En Yucatán yo vivía a gusto, tenía tres trabajos pero Luis me trajo a la ciudad.
-Todos le llaman Manzanero y pocos recuerdan que su segundo apellido es Canché...
-A veces pienso que me hubiera gustado hacer una carrera como Manzanero Canché, con los apellidos combinados pero no tuve esa suerte. Por eso mismo en mis presentaciones siempre acentúo que yo soy maya. Y si usted ve mi publicidad siempre aparezco con mi guayabera y mi sombrero para saber que nunca perderé mi esencia maya.
- ¿Qué queda en Armando Manzanero del recuerdo de Juanita Canché?
- Mi madre es lo más importante en mi vida después de mi abuela. Luego de tantos años de muerta la sigo recordando por su gran espíritu (maya tenía que ser), su alegría (maya tenía que ser) y su capacidad para sentarse a comer con la gente de su misma raza sin importar si era un lugar de aristócratas o de gente humilde.
"Mi mamá vivió hasta los 94 años y cuando ya no pudo ir al baño se despidió de todos nosotros. Así de grande fue su espíritu".
- Además de la Big Band, suele apoyar muchos artistas jóvenes y hasta desconocidos. ¿Qué motiva esta actitud?
- Los medios logran sacar a relieve algunos artistas, pero hay muchos otros que no tienen esa facilidad. Quién sabe cuánto talento se queda sin salir a flote. Ahora acabo de grabar un disco con Rodrigo de la Cadena, un muchacho de 22 años a quien le gusta cantar muy a la antigua pero yo lo estoy sacando de esa onda para que cante con arreglos nuevos. Y próximamente saldrá al mercado Mufu, un grupo de jóvenes cantantes mexicanos que son maravillosos.
- A causa de esa labor, algunos lo llaman patriarca de la canción.
Si no el patriarca, sí soy una gente que se preocupa por su prójimo y un enloquecido del arte y de todo lo que los mexicanos han aportado al mundo.
- Por qué le brillan los ojos cada vez que se sube al escenario a cantar con la Big Band Jazz?
- Cuando comencé a tener nociones del amor y las cosas bellas, estaba muy de moda el señor Luis Arcaraz y su big band. Yo fui su fanático más grande y cada vez que iba a Yucatán, lo veía a como diera lugar. En una ocasión, un viernes a las dos de la tarde iba en bicicleta y me atropelló un automóvil. Me llevaron a la Cruz Roja y como era viernes me dijeron que estaría ahí hasta el lunes. Pero ese día se iba a presentar Luis Arcaraz en el Teatro Mérida. Pues sepa usted que a las cuatro de la tarde yo me salí de la Cruz Roja y me fui a verlo con todo y los vendajes en mi cuerpo. Imagínese que ahora pasa el tiempo y tengo la oportunidad de cantar con otra gran banda. Yo lo hago por razones sentimentales muy fuertes.
ÁLBUM
- En el disco 'Ni antes ni después', Armando Manzanero tiene de cómplices a la Big Band Jazz de México, al pianista Eugenio Toussaint, al cantante Gualberto Castro y otros destacados colegas.
- El álbum viene a sumarse a uno que el cantautor ya había presentado el año pasado; también acompañado por la agrupación de jazz.