Yuri conserva intactos sus dones

"La cantante veracruzana se luce como intérprete, en una presentación llena de color en el Centro de Convenciones"

Félix Rodríguez

Son casi 40 años de carrera, y Yuri aún conserva intacto sus dones. Su voz, carisma, pericia para el baile y su capacidad para la comedia, no muestran desgaste alguno.

Durante su concierto en el Centro de Convenciones de Mazatlán, “La güera”, como es conocida, agradeció a Dios este privilegio, recordó que cantantes de su generación, debido a los excesos, de los que ella no estuvo exenta, han perdido sus talentos.

“Doy gracias a Dios, porque a pesar del tiempo y las cosas que he vivido, me ha ayudado a mantener mis dones”.

El tour “Tan Cerquita” trajo a Yuri de nueva cuenta al puerto. En 2010 estuvo aquí para la coronación de la Reina del Carnaval y en 2012 para los Premios Oye. Ahora regresó con un nuevo disco bajo el brazo en el que rescata sus éxitos de hace casi 35 años y les dio una “chaineada”, como ella dice.

Su presentación comenzó a las 21:47 horas del pasado viernes. Con un largo vestido en pedrería plateada y su larga cabellera rubia entonó “Es ella más que yo”, “Déjala” y “Esperanzas”.

“Me da mucho gusto que me acompañen en esta noche tan especial, en este tour ‘Tan Cerquita’ vamos a acordarnos de todas esas canciones con las que ustedes se enamoraron, ‘cuchiplancharon’, tuvieron a sus chamacos, se divorciaron, los mandaron a la conchichina a los susodichos, en fin, gracias por estar conmigo en esta noche tan especial”, comentó.

Yuri se rió de su pasado, de su vida de excesos y compartió cómo el Cristianismo, el amor de Dios la salvó. Se burló de Mijares, su amigo, con quien hizo una gira de cuatro años y entendió por qué el divorcio del cantante y Lucero.

Durante las casi dos horas del concierto, que finalizó a las 23:42 horas, los asistentes disfrutaron de una Yuri que lució más como intérprete, pero que también enamoró la pupila con su figura que resaltaba con espectaculares vestidos largos, cortos y sexys en colores rojo, azul, dorado, blanco y negro.

Cuatro bailarines la acompañaron y una enorme pantalla a su espalda mostraba videos de ella y hermosos paisajes de México; playas, desiertos, atardeceres y briosos caballos fueron parte de las imágenes.

El público coreó, si no todos, la mayoría de los temas, entre ellos “Amiga mía”, “Qué te pasa”, “El espejo” y “La maldita primavera”.

“La güera” le siguió con “Cuando baja la marea” y “Detrás de mi ventana”. Por minutos desapareció de la escena y regresó con un nuevo vestido. En esta ocasión, portó uno en color negro, entallado, corte de sirena y con vivaces rosas rojas. Su cabellera fue coronada con una tiara de flores y cantó “Yo te pido amor” y “Ya no vives en mí”.

Se quejó del calor, pero como buena mujer de puerto, dijo que así como las mazatlecas, era “aguantadora”, sin embargo, dijo: “Se me está asando todo con la faldeta esta, hasta el pensamiento”.

 

Yuri terminó su presentación con una fiesta. Vestida con un leotardo blanco y una larga falda de folclor en encajes del mismo color, que dejaban ver su piel clara, y un sombrero "vueltiao", cantó “No tengo dinero”.

Para el “encore”, la veracruzana vistió de dorado. Un corto atuendo la hizo lucir muy sexy cuando cantó “Hombres al borde de un ataque de celos” con arreglos de samba.

 

Las tres Yuri

Mientras Yuri cantaba arriba del escenario, abajito estaban muy atentos Andrés y Paulo. Ellos iban vestidos como la jarocha, son imitadores de ella y buscaban captar su atención.

Paulo (aka Elástika) llegó temprano al concierto de “La güera”, iba con un vestido largo dorado, una larga peluca rubia ondulada y fleco. De inmediato quienes esperaban para ingresar a la explanada del Centro de Convenciones de Mazatlán se acercaron a él para tomarse fotos.

El joven de Guadalajara que ya tiene 10 años viviendo aquí en Mazatlán, comentó que desde entonces ha ido perfeccionando su imitación de la intérprete de “Yo te pido amor”. Ya ahora solo le toma de 30 a 40 minutos estar listo como este personaje.

“Es al que más me parezco, más fuerte y el que más me da de comer”, presume quien trabaja en un centro nocturno de la ciudad.

Ya durante el concierto, Yuri notó la presencia de ambos y les pidió que subieran con ella al escenario. Dando muestra de su sencillez, la cantante se mostró generosa al permitirles a ambos lucirse. Al verlos, Yuri dijo que bien podría ponerlos a trabajar: “Mientras yo me presento aquí, ellos podrían dar un concierto en otro lugar”.

Pícara y juguetona, cantó con ellos “Ya no vives en mí”, se tomó algunos videos y selfies y le cantó "Las Mañanitas" a Andrés, quien emocionado le agradeció el gesto.