Hábitos: elementos clave para un mejor rendimiento escolar

Los hábitos básicos que debe de tener un alumno son responsabilidad, lectura, comunicación, empatía, estudio y curiosidad, señalan las maestras Susana Guadalupe Jiménez y Evangelina Vázquez, quienes imparten el 6 sexto grado de primaria

Un hábito es el resultado de una acción que se repite frecuentemente de forma automática. Desde pequeños se realizan actividades basadas en la rutina por lo que con el tiempo se vuelven un hábito y esto es una clave importante para el éxito académico y el desarrollo personal a largo plazo.

Las maestras de sexto grado de primaria Susana Guadalupe Jiménez Peimbert, y Evangelina Vázquez Estrada destacan que una característica importante de los hábitos, es que estos son desencadenados por señales de nuestro entorno, y en un mundo ideal, los buenos hábitos como el ejercicio, la alimentación saludable y la lectura serían tan fáciles de adquirir, como preparar café; sin embargo, puede haber diversos factores que puedan interrumpir el proceso.

“Como maestras de primaria vivimos el día a día con diversas ideas y costumbres de cada uno de nuestros alumnos, por lo que cada ciclo escolar se vive de diferente manera, por ello intentamos enfocarnos en los buenos hábitos y así propiciar un mejor desempeño en nuestros alumnos”, destacó la maestra Susana.

Jiménez Peimbert considera que los hábitos básicos que debe tener un alumno son los siguientes: Responsabilidad, Lectura, Comunicación, Empatía, Estudio y Curiosidad.

Cómo fomentar los hábitos

“Existen ciertas actividades en las que los padres de familia pueden apoyarse, para que, de esta forma fomenten dichos hábitos en sus hijos”, comentó la maestra Evangelina Vázquez.

Hábito de la responsabilidad: Para originar el sentido de la responsabilidad es recomendable comenzar a fomentar poco a poco el compromiso y esto es con base a la edad de cada pequeño, por ejemplo: Levantar el plato de la mesa, recoger la basura, ordenar su cuarto, preparar su mochila y uniforme, en la escuela estar atento a sus materiales, mantener en orden su escritorio, hacer su tarea, preguntar si tiene dudas, entre otras.

Hábito de lectura: En primera instancia, se debe conocer los gustos y preferencias de cada niño para poderlo orientar en su itinerario lector, llevar la lectura más allá del escritorio, es decir, aprovechar cualquier momento y lugar para disfrutar de una buena lectura, propiciar momentos significativos con el niño alrededor de la lectura, proponer o recomendar lectura y permitirle elegir.

“Es importante tener en cuenta que como adultos debemos predicar con el ejemplo, por lo que se sugiere leer frente a nuestros pequeños”, destacó la maestra Susana.

Hábito de comunicación: Se debe tener en cuenta que la comunicación es el intercambio de información entre personas, es importante por ello tener en cuenta ciertos puntos para que la comunicación pueda ser asertiva, aquí se presentan algunas estrategias que pueden ayudar a vivirla de la mejor manera.

“Para proporcionar instrucciones claras y apropiadas debemos tener en cuenta la edad del niño, elogiarlo cada vez que se pueda y como consecuencia de algo bien realizado, pedirle que comunique siempre sus sentimientos y lo haga con calma, ser sinceros, sin duda algo sumamente importante es que debemos siempre escucharlos con atención”, resaltaron las maestras.

Hábito de empatía: Esto es la capacidad de comprender y compartir los sentimientos de los otros; por lo que esto nos permite ver las cosas desde la perspectiva del otro, en lugar de la nuestra. Para fomentar la empatía en nuestros niños es importante tener en cuenta lo siguiente: demostrar afecto, cultivar la paciencia, benevolencia hacia los demás, ser conscientes del lenguaje no verbal, es decir cuidar nuestros gestos corporales, cuidar los tonos de preguntas y respuestas, respetar y escuchar atentamente cuando alguien nos habla.

Hábito de estudio: Los hábitos de estudio son costumbres que se adoptan para alentar a aprender y estudiar. Si se fomentan en los niños, desde pequeños, no solo aprenderán porque tienen que hacerlo, sino porque surja el deseo de aprender en ellos.

Tips básicos que pueden usar al momento de estudiar con sus pequeños:

-Tener un área o zona específica para realizar tareas

-Que no existan distractores como televisión, celular, videojuegos

-Estudiar con música que estimule los sentidos

-Tener un horario determinado dentro de su rutina diaria

-Recurrir a juegos lúdicos.

Hábito de curiosidad: Las personas curiosas se cuestionan el porqué de las cosas, su funcionamiento y dejan de lados los argumentos banales como es “siempre se ha hecho así”. Eso permite innovar, mejorar los procesos, plantear nuevas propuestas, buscar nuevas soluciones.

Las maestras comparten aquí algunos elementos de interés que pueden ayudar a despertar la curiosidad en el niño:

-Observar el entorno siempre como si fuera la primera vez

-Invitarlo a probar alimentos nuevos

-Cambiar rutinas, como por ejemplo el camino a casa

-Involucrarlo en la investigación de los lugares que visita como por ejemplo, un museo.

-Investigar sobre cualquier cosa que le llame la atención

-Desarrollar nuevas habilidades como patinar, andar en bici, tomar una ruta de camión.

-Cuestionar sus dudas, entre otros.