Lo que hay que enseñar a los niños para su seguridad

Yolanda Waldegg de Orrantia
14 octubre 2021

Siguiendo con el tema de lo que hay que enseñar a los niños para su seguridad, puesto que hoy en día hay más situaciones de riesgo para los hijos, cosas que hace no tantos años nunca se nos habrían ocurrido.

La violencia se ha disparado, no sólo en México, pero desgraciadamente somos de los lugares más violentos, la vida no parece tener ningún valor para mucha gente que termina por hacer “cueruda” su alma y ya no tiene ningún reparo en hacer daño a otros, negocios son negocios y hoy, que todo se quiere en cuestión de segundos, porque si tarda mucho en conectarse tu móvil, ya estás impacientado y todo lo queremos así, con el toque de un botón, en el momento y sin esfuerzo, muchos chicos se meten a conseguir así el dinero para todo lo que se les antoje.

Entonces, la primera prevención es enseñar desde pequeños a trabajar para ganarse lo que desea, la paciencia, para no tirar la toalla después de 10 minutos de trabajo; la templanza, para no hacerse de necesidades que no lo son.

Otra cosa con la que no teníamos que lidiar era con el internet, ni siquiera con la televisión; si vemos programas de aquellos tiempos, eran tan blancos que no preocupaban, pero fueron cambiando de a poco, sin que nos diéramos mucha cuenta, no eran enemigos de la familia, ni ponían en duda el respeto a los padres y su autoridad.

Hoy son enemigos de la familia y del valor de la persona por el simple hecho de serlo, hasta en caricaturas y películas para niños, meten la ideología de género, pensando que con mucho repetirlo lo malo pasa a ser bueno y lo están logrando.

Está comprobado que tanto daño hacen los aparatitos en los niños en su desarrollo y educación integral, el mismo daño que hace en todas las edades cuando se convierte en vicio. Por algo los dueños de esos negocios no le permiten a sus hijos tenerlo.

Entonces, cuando los chiquitos necesiten ir a la escuela y quieran tenerlos un poco controlados, no se va a poder y cuando tengan edad suficiente para acceder al mundo virtual, debe saber que no puede brindar sus datos personales ni familiares y tampoco es conveniente que hable con personas que no conoce en la vida real.

Y si hemos buscado alguna imagen para ilustrar algún trabajo, sabemos qué tan fácil es que entre ellas aparezcan personas y lugares que no debían estar ahí, explicar de no pinchar ahí por ser peligrosos y en qué consiste el peligro.

Les decían “robachicos” y siguen siéndolo, es importante establecer una relación de confianza desde una edad temprana, de manera que te cuenten cualquier cosa que encuentren mientras navegan, además de controlar qué programas ven en la tele y si es posible verlos juntos y aclarar lo que se necesite aclarar en ellos.

No irse con personas que no conoce es otro punto importante. El niño debe tener claro que, si alguien le pide que vaya con él o ella, no debe acceder por ningún motivo, aunque le puedan decir que “tus papis me mandaron recogerte porque tienen un contratiempo” nada y si lo llevan por la fuerza, que sepa de los signos con las manos para alertar a quien lo vea que está en peligro y le ayude.

Todos deberíamos de saberlo, los grandes y los chicos, que si no, de nada sirve que los hagan, aunque esa persona diga que es amigo de papá o mamá, jamás debe fiarse y, por supuesto, no debe subir al coche de un desconocido, por eso es conveniente que siempre le recojan padres o abuelos.

Si algo no le gusta, tu hijo debe saber que tiene derecho a negarse. Enséñale a decir “¡basta!”, con determinación, mirando a los ojos del agresor y colocando las manos hacia adelante, a modo de protección. Si se siente incómodo con alguna situación, alejarse, gritar y buscar la ayuda de otro adulto.

Por otra parte, muchos de los accidentes infantiles se producen mientras juegan y la mayor parte son en casa, por eso es importante, no se trata de que se cayó y se raspo patinando o aprendiendo a andar en bicicleta, esas cosas sirven y no son peligro, a menos que caiga del segundo piso, que sí es peligro.

Deben ser conscientes de no meterse objetos pequeños a la boca, si un simple dulce puede causar atragantamiento, que no debe jugar con objetos afilados, que un simple lápiz puede causar mucho daño si se maniobra con él sin cuidado, ni jugar cerca de la estufa o donde se plancha (si existen todavía).

Para acabar pronto, dentro de la casa solo se juega a cosas tranquilas. Y muy importante, que no tiene que sentirse obligado a asumir ciertos roles en los juegos, porque los demás niños lo presionan.

Y entre que la luz va y viene y estoy cansada por el desastre que dejo el ventarrón, termino deseándoles que se recuperen pronto del sobresalto de nuestra tormenta.