Piden católicos por la paz en Sinaloa y en México en procesión penitencial en Mazatlán

Belizario Reyes
03 marzo 2025

‘Tenemos un grave problema de violencia, de seguridad al que no debemos acostumbrarnos’, señala el Obispo de Mazatlán

Por la paz en Sinaloa y en México donde se viven problemas de violencia y seguridad pidieron decenas de fieles, religiosas y religiosos al participar la mañana de este lunes en la Procesión Penitencial y por la Paz que realiza la Diócesis de Mazatlán por algunas vialidades de este puerto, en la que también pidieron porque mejore la salud del Papa Francisco.

“Es una tradición desde que se hizo la Diócesis de Mazatlán; a partir del año de 1959, don Miguel García Franco tuvo a bien programar que hubiera esta peregrinación penitencial y que con el curso del tiempo cuando ha aumentado la violencia pues se empezó a pedir también por la paz como lo realizamos en esta ocasión porque estamos muy urgidos de paz”, dijo el Obispo de la Diócesis de Mazatlán, Monseñor Mario Espinosa Contreras.

“Tenemos un grave problema de violencia, de seguridad, al que no debemos acostumbrarnos sino la gente tiene temor, tiene miedo, se siente desprotegida y ahí es el gran reto para las autoridades de todos los niveles y también para todos los ciudadanos que debemos ser hombres y mujeres de paz”.

En la procesión que inició cerca de las 11:00 horas entre la avenida Carnaval y calle Playas Gemelas, del fraccionamiento Playa Sur, y se dirigió hacia la Catedral Basílica de la Inmaculada Concepción, en el Centro, también se pidió por la salud del Papa Francisco, que ha estado enfermo en los últimos días.

“Y también pedimos por la salud del Santo Padre Francisco que está ahorita en el hospital luchando, pero al mismo tiempo sereno, en las manos de Dios”, subrayó Monseñor Espionosa Contreras.

En esta procesión que continuó por vialidades por la avenida Miguel Alemán y calles como Teniente José Azueta, Aquiles Serdán y 21 de Marzo hasta llegar a la Catedral, participaron poco más de 400 personas, la mayoría vestidas de blanco como símbolo de la paz.

Y es que a partir del 9 de septiembre pasado en Sinaloa se recrudeció la violencia que ha dejado centenares de personas asesinadas y desaparecidas, daños a la economía, entre otros efectos, de lo cual Mazatlán y el sur de la entidad no han estado exentos.

Ya al concelebrar la misa en la Catedral, el Obispo de la Diócesis de Mazatlán, que comprende todo el sur de Sinaloa, manifestó que además de pedir por la paz y por la salud del Papa Francisco, esta eucaristía es ya como una preparación para el inminente tiempo de la Cuaresma, las precesiones son oración especiales gratas al Señor donde uno le ofrece el sacrificio de caminar, de estar bajo el sol y de ir rezando o cantando alabanzas al Señor y cuando se hacen procesiones, lo mismo en la eucaristía el rito penitencial, porque la procesión es equivalente al rito penitencial.

También agradeció el mensaje del Papa Francisco “Caminando juntos en la esperanza” pues en la vida es importante desde que se nace hasta que se muere estar siempre abonando, estar viviendo con inmensidad, con gusto, con determinación, sin excepciones ni derrotismos, sino estar de pie tratando de cumplir sus obligaciones y al mismo tiempo estar viviendo la fe y el evangelio.

“Nuestra inspiración dice el Santo Padre es siempre el camino de Egipto a la Tierra Prometida del pueblo de Israel, una travesía azarosa, no fácil, donde iban todos juntos, donde no faltaron también en algún momento infidelidades incluso, pero luego rectificaban o Moisés o Aarón los ayudaban a rectificar, hay que mirar siempre que estemos en camino y pedirle a Dios que nos dé ánimo de vivir, de desarrollarnos, no estar estacionados sino también en un plan continuo de desarrollo, de personalización, de humanización”, recalcó el Obispo.

“Lo ideal sería que en la hora de la muerte todos estuviéramos más desarrollados, que fuéramos más humanos, que fuéramos más personas, lo que caracteriza a la persona desde sus raíces es ser capaz de relacionarse con los demás adecuadamente y se es más persona cuando somos más capaces de relacionarnos adecuadamente con los demás, algo que nunca termina, el que ofende, el que agrede, el que se burla, el que rechaza está despersonalizado”.

Recalcó que la orientación de la personalización es la capacidad de tomar en cuenta la dignidad de la persona que se tiene enfrente y tratarla en consecuencia con las convicciones mentalidad de que es una persona valiosa, hija de Dios.

“En seguida el texto nos sugiere que nunca olvidemos ir juntos, no ser francotiradores ni individualistas ni aislados, el que es individualista perjudica el desarrollo de las cosas, como el cualquier equipo el que es personalista no sirve, se necesita tener sentido de equipo, conciencia de que vamos juntos, por eso en el Jubileo se nos está insistiendo: no pierdas de vista que vamos juntos y hay que vivir la sensibilidad por los demás y también la caridad a los demás”, subrayó, entre otros puntos, en la misa celebrada tras concluir la Procesión Penitencial y por la Paz.