Reaparece Consuelo Olivas, ahora en Gobierno de Pucheta
"La activista, que fue esposa del entonces Alcalde Jorge Pasos, a quien denunció por agresión, es ahora funcionaria de Bienestar Social en el Ayuntamiento mazatleco"
La activista y defensora de las mujeres, Consuelo Olivas Tirado, se sumó al Gobierno municipal: luego de haber sido presidenta del DIF hace 15 años, ahora se integró como funcionaria de Bienestar Social. Su nombre se conoció en el País en 2002 cuando denunció a su esposo, el entonces Alcalde Jorge Rodríguez Pasos, por haberla golpeado.
A partir de esa agresión, Olivas Tirado fundó aquí el primer Centro de Atención contra la Violencia Intrafamiliar, un organismo que atendió a cientos de mujeres violentadas que, como ella, vivieron golpes a manos de sus parejas, desde entonces es activista a favor del empoderamiento femenino.
Durante 14 años ella fue la directora del CAVI Mazatlán.
Su caso es parte de la historia política del puerto, la denuncia por agresión desató polémica cuando ella era presidenta del DIF, por este hecho el Congreso de Sinaloa aprobó el primer desafuero de un Presidente municipal, el único hasta la fecha.
Esto obligó a Rodríguez Pasos a separarse del cargo.
Hoy Olivas Tirado regresó a los pasillo del Palacio Municipal invitada por el Alcalde Fernando Pucheta.
¿Por qué integrarse al Ayuntamiento, le interesó el proyecto municipal?, se le preguntó.
“Sí así, es y ¿por qué no aceptarlo?, a final de cuentas, estamos sirviendo a la ciudadanía, es algo que a mí me caracteriza y si algo me gusta es precisamente en ayudar”.
¿Cuánto tiempo estuvo al frente de CAVI?
“Como 14 años, fui la fundadora, ahora por qué no trabajar desde otro ámbito en el cual es algo que me encanta hacer que es la gestoría, algo que me encanta hacer que es servir, y bueno, Fernando me dio la oportunidad de estar en esta nueva etapa”.
Desde hace unos días Consuelo se integró al Gabinete municipal, se le ha visto cerca del Alcalde, en las sesiones de Cabildo se mantiene en el área de sus asistentes, y en actos públicos se encarga de acercarle el micrófono, toallas, o tijeras para corte de listones, como ayer en la Colonia Salvador Allende.
Olivas Tirado parece otra a la mujer del retrato que cuelga en las oficinas del DIF Municipal, hoy se le percibe segura y discreta. En una palabra, empoderada.
Cuando denunció su agresión, apenas tenía tres meses en el DIF, su caso fue tan polémico que le dio la vuelta al País y una televisora transmitió su historia en un programa de cadena nacional, la historia narró su experiencia como víctima de abuso, pero al mismo tiempo de empoderamiento de las mujeres.
Hoy la activista regresa a los pasillos del Palacio Municipal.