Temen madres fálicas al abandono: Sergio Rodríguez Bonilla

Participa el psicoanalista en el I Congreso Virtual de Salud Mental

¿Dónde nace el miedo desproporcionado de la soledad? Es una pregunta que hace Sergio Rodríguez Bonilla a su audiencia dentro del I Congreso Virtual de Salud Mental, Desaprendiendo para aprender nuevos paradigmas.

Y lo hace para explicar por qué existen las madres fálicas, aquellas que criaron un hijo porque necesita a alguien que la cuide, que la quiera, que no la abandone.

“SI no se hubiese sentido abandonada, no hubiera existido jamás a un niño que se sienta culpable de dejar a su madre”, expresó.

Rodríguez Bonilla explicó que la palabra falo, en psicoanálisis no se refiere al órgano sexual masculino, es el significante de la falta, esta falta constitutiva de la naturaleza psíquica, del sujeto del deseo y hacen creer al niño que es el falo.

Cuando esa mujer, que se siente abandonada, se casa, sin amor, se convierte en madre, entonces hace de su hijo el centro de su vida y excluye de la educación y la vida de su hijo al padre.

Hacer de su hijo un conquistador, un casanova, un don Juan, pero está bajo la falda de la madre, ella lo mantiene, no hay un padre presente, el padre le permite a la mamá que se apropie del hijo.“

La madre hace sentir al niño que es omnipotente, lo ha sobrenarcizado, es un chiquillo odioso que no tiene límites”, expresó.

La madre fálica, señaló, inicia tratando a su hijo como un hijo, y cuando llega a la adultez temprana cambia el trato, lo trata como a una pareja, hasta le exige que le dé parte de su quincena y pobre de él si quiere tener sentimientos de que se quiera independizar, lo educó para que esté con ella para toda la vida.

“Cuando la madre fálica llega a la adultez mayor va a tratar a su hijo como si fuera su padre, cada fin de semana pendiente de ella, llevándola al médico, a sus medicinas, tendrá a su padre, creado por sí misma, para, cuando vuelva a ser una niña, tener a su padre para cuidarla”, expresa.

Es un círculo vicioso que no se romperá porque el hijo será, también, un padre ausente, más pendiente de su madre que de sus propios hijos.

Pero, señaló el especialista, todo lo que pasa no es culpa de la madre, sino del abandono que sufrió.

“Necesitamos trabajar la percepción de soledad, no siempre es mala, por ello debemos saber educar a los hijos con las palabras más adecuadas, esas palabras los van a acompañar para toda su vida, sobre todo en la adultez, las palabras que se dejan en los hijos pueden crear patologías”, dijo.

Pidió a los asistentes a la conferencia, que se realizó de manera virtual, que se le haga sentir a la madre que no la van a abandonar, que la aman, aunque no siempre hagan lo que ella quiere o no vivan con ella.

El I Congreso Virtual de Salud Mental consta de un ciclo de conferencias que se llevarán a cabo todos los días de mayo, con excepción de sábados y domingos, son completamente gratuitas, sin fines de lucro ni inclinaciones políticas, es meramente la inquietud de los conferencistas para contribuir a la mejora de una sociedad con salud mental.

Es la madre la que necesita la terapia, la que necesita independizarse de los hijos, no los hijos de ella, señaló.

El marte la conferencia será Acompañamiento teratológico existencial en época de pandemia, impartida por Mauricio Addif, a las 19:00 horas a través de Zoom con el ID 859-3135-3348.