Víctor Robles, un hombre fuerte, visionario e impulsor del deporte y el altruismo

Ana Karen García
06 agosto 2023

El dueño del restaurante El Capitano falleció el pasado 30 de julio; su familia lo recuerda como un hombre de mucha fortaleza, deportista desde joven, promotor deportivo y un gran ser humano que ayuda a quien más lo necesitaba

MAZATLÁN._ Víctor Robles fue una personalidad mazatleca en sus apariciones de publicidad para su restaurante, “El Capitano”, en la Zona Dorada. Él se mostraba tal cual era, con una chispa que lo caracterizaba, comentó Érika, la madre de sus hijos, quien lo describió también como un hombre de mucha fortaleza, “para él no había un ‘no’, él siempre iba por el ‘sí’”.

Víctor Manuel Robles Cruz, hijo de Julián y María del Rosario, siempre tuvo el sueño de formar una familia y lo cumplió al lado de Érika, con quien procreó a dos hijos, Víctor Manuel y Érika.

Érika, la hija menor, heredó el gusto por la lectura, y su hermano Víctor Manuel el gusto por la atención al cliente, por la vida entre comensales.

Como un hombre de familia, un empresario con gusto por el deporte, los libros, los perros y el altruismo, así como un buen padre y un excelente líder con sus empleados, es como la familia de Víctor Robles lo recuerda.

Víctor Manuel, su hijo mayor, destacó que el sueño de su papá siempre fue tener una familia, por lo que siempre les dio tiempo de calidad y procuró compartir con ellos momentos importantes como los partidos de fútbol, los paseos por la playa y su amor por los perros.

“Desde chiquito él siempre me dejó muchas enseñanzas, todos los días era aprender algo nuevo de él, porque él era una persona muy bondadosa y le gustaba mucho ayudar a la gente y hasta ahora que que en paz descanse, sigo aprendiendo cosas de él”, recordó Víctor Manuel con cariño.

El hijo del fundador de El Capitano explicó que la vida que su papá llevaba como empresario nunca representó un problema para darle tiempo a su familia, al contrario siempre buscó la manera de compartir sus actividades e involucrarlos en sus proyectos.

El gusto que Víctor Robles tenía por los deportes, manifestó su familia, lo convirtió en un gran impulsor de éste en varias ramas como el fútbol, el béisbol, pero sin duda lo que más le gustaba era el surf y el box, disciplinas que en su juventud desempeñó y que le dejaron grandes anécdotas para contar.

“De chiquito siempre me decía que jugaba con los niños de la cuadra futbol, beisbol, siempre le gustó surfear, le apasionaba mucho eso y como que él se veía reflejado en todos los que apoyaba para que fueran grandes deportistas”, contó su primogénito.

La familia del empresario restaurantero mencionó que su amor principal fue el boxeo, en donde logró ganar los guantes de oro en Sinaloa, en el año de 1976, motivo por el que tuvo la oportunidad de convivir con boxeadores como Julio César Chávez y Sául “El Canelo”, Álvarez en sus inicios, fueron grandes experiencias.

“Mi tía me acaba de contar una historia, porque mi abuela Chayo siempre ha sido muy preocupona, a mi papá le gustaba andar de aquí para allá y como boxeaba se iba por todo Sinaloa, hasta Tijuana iba a boxear y un día se fue a Los Mochis a pelear y mi abuela pues ni sabía nada de ese suceso”, dijo Víctor Manuel.

“Y ya mi tío Ángel le habló a mi abuela Chayo, prende la tele en el Canal 7, ya la prendió y estaba mi papá boxeando, a mi abuela le quiso dar un infarto, pero ya luego andaba grite y grite apoyándolo y ganó la pelea mi papá”, platicó Víctor Manuel sobre la carrera de su papá en el pugilismo.

Un hombre muy altruista

Érika, la madre de sus hijos, narró que el altruismo que Víctor llevaba a cabo era de corazón, él veía la necesidad y ofrecía su apoyo y ésto detonó en el 2002 cuando inició su faceta de empresario.

“Él siempre ofrecía la ayuda, él veía a alguien que carecía de algo y él se acercaba y ayudaba, no necesitaban ir a pedirle a él, cuando empezó su faceta de empresario, fue cuando empezó a apoyar más el deporte”.

Un legado restaurantero

Desde que Víctor Manuel tenía 13 años de edad trabajó con su papá y él le enseño cómo era atender desde la cocina hasta la barra, es por eso que ahora piensa en darle vida nueva al proyecto que con tanta dedicación creó su padre y reabrir “El Capitano”.

“Tenemos sueños qué compartimos y pues yo estoy aquí para seguir con esos sueños que es reabrir el restaurante en un futuro, crecí viendo todo eso y la verdad me apasiona mucho cuando estoy en un lugar así, como que se me viene la adrenalina de querer a comodar todo y que todo esté funcionando bien.

Muchas personas conocidas y desconocidas, mexicanas y extranjeras, se han acercado a la familia para ofrecer las condolencias y aunado a ésto compartir un poco de su historia al lado de Víctor, quien sin duda dejó su huella.

Su hijo expresó que su papá Víctor no solo se le recordará como alguien que se codeó con gente famosa como Niurka, William Levy, Carmen Salinas y deportistas de renombre, sino que también trascendió como una persona perseverante, soñador, trabajador y bondadoso.

Víctor Manuel Robles Cruz falleció el pasado domingo 30 de julio, a sus 65 años de edad, víctima de un cáncer de pulmón, contra el cual luchó hasta el último momento.

Sus homenajes póstumos y misas serán difundidos por medio de la página oficial de su restaurante El Capitano.