La Guelaguetza
07 noviembre 2015
"Un regalo festivo de folclore, tradición y arte en Oaxaca"
MÉXICO (EFE)._ La ciudad Oaxaca celebra estos días las fiestas de los "Lunes del Cerro" en las que sus 100 mil visitantes disfrutan de actos tan autóctonos como la tradicional Guelaguetza, en donde las diversas comunidades oaxaqueñas ofrecen al público un espectáculo de arte, folclore y tradición.En el lenguaje de los zapotecos, la etnia más numerosa en Oaxaca, la palabra "Guelaguetza" se refiere a la "acción de regalar" y eso es precisamente lo que hacen quienes en ella participan, regalar a los asistentes al espectáculo un trocito de la esencia de las siete regiones oaxaqueñas.
Cada grupo proviene de una localidad diferente y en su ofrenda a la ciudad de Oaxaca se visten con sus trajes típicos, danzan, explican cómo son algunas de sus costumbres y al final lanzan entre el público artesanías locales.
Aunque La Guelaguetza es una tradición que se remonta hasta antes de la conquista española, fue en los años treinta cuando comenzó a representarse como en la actualidad.
Hoy en día se celebra dentro de las Fiestas de los Lunes del Cerro, los dos últimos lunes del mes de julio, después de la fiesta de la Virgen del Carmen del día 16, en el Cerro del Fortín.
Sus orígenes están relacionados con el culto a la diosa del maíz, pero la representación actual es sin duda fruto del mestizaje entre las culturas española e indígena, mezcla que puede apreciarse en algunas de las actuaciones.
Por ejemplo, la "Danza de la pluma", interpretada por el pueblo de San Bartolo Coyotepec, representa la conquista de los españoles a los aztecas, que aparecen ataviados con hermosos y coloridos penachos de plumas.
Su tradición y folclore hacen que La Guelaguetza sea una de las fiestas más importantes de la región y que, en opinión de la Secretaria de Turismo estatal, Beatriz Rodríguez, sea considerada como "la fiesta de América".
Las Fiestas de los Lunes del Cerro también son muy importantes económicamente para Oaxaca puesto que, según datos de Turismo, en el periodo comprendido entre el 17 y el 28 de julio, la ciudad va a recibir más de 100 mil visitantes que generarán un movimiento económico de más de 30 millones de dólares.
Regresó la normalidad
Aunque este año las fiestas se están llevando a cabo con normalidad, en los últimos tiempos el brillo de la Guelaguetza se había visto empañado por los conflictos sociales entre el sindicato de profesores y el Gobierno de Ulises Ruiz.
A pesar de que el conflicto dura ya décadas, 2006 fue un año sangriento para el estado, ya que una veintena de personas fallecieron en manifestaciones que se prolongaron durante medio año.
La Guelaguetza fue boicoteada y suspendida, hecho que dañó mucho al turismo oaxaqueño, segunda fuente económica de los habitantes del estado.
En los años posteriores, a pesar de las constantes amenazas de boicot, la fiesta pudo celebrarse, paralelamente a una organizada por los grupos alzados contra el Gobernador que se celebra independiente a la del Gobierno.