Rinde protesta Jorge Herrera como gobernador de Durango
08 noviembre 2015
"El nuevo gobernador presumió ante sus seguidores priiistas que tendrían al primer Ejecutivo estatal en el país que no habrá de cobrar salario, pues esa fue una de sus ofertas de campaña."
Gómez Palacio, (NTX).- El reto para el nuevo gobernador Jorge Herrera Caldera es conciliar a una sociedad dividida políticamente y garantizar la seguridad de un estado que ha sido presa de los embates del crimen organizado. Esa es la herencia que recibió hoy el priista al asumir el cargo.En su primer discurso como gobernador, de más de nueve cuartillas, Herrera Caldera presumió ante sus seguidores priiistas que tendrían al primer Ejecutivo estatal en el país que no habrá de cobrar salario, pues esa fue una de sus ofertas de campaña.
Es su primera acción de gobierno, un paso de lo que busca ser un sello personal y forma de hacer política en los llamados nuevos tiempos del priismo.
Desde la mañana militares y policías federales y estatales desplegaron un fuerte operativo de seguridad, lo que también se ha convertido en un signo de los nuevos tiempos.
Ello para garantizar sin sobresaltos el traslado de poderes entre dos políticos de la llamada "nueva era" del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Un hecho notorio fue la ausencia de la lideresa nacional del PRI, Beatriz Paredes y de la mayoría de gobernadores priistas, quienes al parecer privilegiaron los preparativos de los festejos del Bicentenario sobre el cambio de poderes en Durango.
En el Auditorio Centenario de este municipio, el nuevo gobernador y los invitados especiales despidieron al ahora ex gobernador, Ismael Hernández Deras, con un prolongado aplauso.
En las filas de invitados destacaban las figuras de los tres únicos gobernadores priistas asistentes al acto: Humberto Moreira Valdés de Coahuila; Eugenio Hernández Flores de Tamaulipas y Fernando Ortega Bernés de Campeche.
Así en plenos festejos del Bicentenario del inicio de la Independencia, Herrera Caldera asumió el gobierno de un estado dividido y con fuerte presencia del crimen organizado, por lo que llamó a la unidad.