Vinculan a proceso al periodista de Veracruz, Rafael León Segovia; fiscalía desestima acusación por ‘terrorismo’
La Fiscalía de Veracruz mantiene el proceso penal contra el periodista Rafael León Segovia por el delito de encubrimiento
El periodista Rafael León Segovia fue vinculado a proceso este martes “única y exclusivamente” por los delitos de encubrimiento por favorecimiento y en contra de las instituciones de seguridad pública, y se descartó el delito de terrorismo por el que la Fiscalía de Veracruz lo había señalado.
En un mensaje, la fiscal general del estado de Veracruz, Lisbeth Aurelia Jiménez Aguirre, señaló que este 30 de enero se dio continuidad a la audiencia inicial y tras escuchar los argumentos de la defensa y al valorar los datos de prueba expuestos por esta Fiscalía, el juez de control José Guadalupe Nucamendi Albores dictó el auto de vinculación a proceso por los cuales se continuará el proceso en contra del ahora imputado.
Al periodista Rafael León Segovia se le impuso como medida cautelar el resguardo domiciliario por el lapso de un año.
La fiscal aseguró que: la “institución actúa con estricto respeto a la libertad de expresión y al ejercicio periodístico, garantizando en todo momento el debido proceso a las personas involucradas, conduciéndose con estricta objetividad y sujetándose al tamiz jurisdiccional”.
El comunicador fue detenido el pasado 24 de diciembre y acusado por la Fiscalía General del Estado de Veracruz (FGE) de terrorismo, encubrimiento por favorecimiento y delitos contra instituciones de seguridad pública.
Al dictarse la vinculación a proceso, el periodista dijo brevemente ante medios que la Fiscalía de Veracruz es quién está en su contra.
“La verdad estoy contento porque actuó conforme a la ley, aquí la Fiscalía es la que me odia, me detesta, por las cosas que he puesto que tienen su delito de poder y su evidencia”.
Denuncian presiones al trabajo periodístico
Minutos antes de que iniciara la audiencia, Gardiel León, hijo del periodista, ofreció declaraciones a medios en las que criticó las acusaciones, cuestionó los argumentos de la fiscalía y denunció presiones relacionadas con el trabajo periodístico de su padre.
Reiteró que las acusaciones contra su padre son “fabricadas” y que la fiscalía está recurriendo a testimonios y señalamientos construidos sin sustento, mientras que la defensa —dijo— ha presentado “pruebas sólidas”.
Consideró que la imputación por terrorismo carece de fundamento, al señalar que el artículo 311 del Código Penal estatal no aplica en los términos en que lo interpreta la autoridad.
También cuestionó que la publicación de información periodística pueda tomarse como causa de “pánico” o daño a la población o a las corporaciones, al grado de pretender encuadrarla en un delito grave.
Sostuvo que una de las razones esgrimidas por la fiscalía para sostener las imputaciones es que el periodista “siempre llegaba primero” a los hechos de alto impacto, desde accidentes hasta escenas delictivas.
“Lo están usando en su contra, como si fuera un delito”, reclamó, al insistir en que los periodistas no están obligados a revelar sus fuentes y que esa dinámica forma parte de su trabajo cotidiano.
Un día antes, la organización Artículo 19 informó a través de redes sociales en redes sociales que el juez Nucamendi Albores rechazó anular pruebas en el caso pese a que, según la organización, existen “graves irregularidades en la investigación por terrorismo y otros delitos realizada por la fiscalía de Veracruz en contra del periodista Rafael León Segovia”.
Exigió “condiciones mínimas de independencia e imparcialidad y la garantía de sus derechos ante una imputación que pretende criminalizar su ejercicio periodístico”.
Artículo 19 advirtió que la imputación por terrorismo constituye “un peligroso precedente contra la libertad de expresión” y condenó “enérgicamente la criminalización que enfrenta por su labor como periodista mediante el uso del sistema penal en el estado de Veracruz”.
El proceso contra Rafael León Segovia se suma a los antecedentes documentados por Artículo 19, que apuntan a años de hostigamiento, apertura de carpetas de investigación sin fundamento y ataques materiales, como el daño al vehículo del periodista y la presunta investigación intrusiva de cuentas familiares.
De acuerdo con la organización, estos hechos se vinculan directamente con la cobertura de violencia y delincuencia organizada que el reportero ha realizado en el sur de Veracruz, en una región marcada por la presencia de macrocriminalidad.
La detención del periodista ocurrido el 24 de diciembre, al salir de su vivienda en Coatzacoalcos, fue señalada por la organización como irregular, al reportarse la sustracción de un vehículo y el supuesto robo de dinero en efectivo durante el operativo.