El payaso temeroso fue reprimido y ni pío dijo

02 septiembre 2016

""

Lector

Sr. Director Editorial

Cuando despertaron, Brozo y otros ilusos, el dinosaurio aun estaba ahí. Hace algunos años “El Tigrito” Azcárraga afirmó pomposo que en Televisa se respetaba la diversidad política e ideológica del país, ponía como prueba al programa El Mañanero y a su personaje conductor Brozo que, según Emilito, es políticamente de izquierda. Hoy y sin decir agua va, al estilo Televisa, “El Tigrito” le quitó el programa al dizque izquierdista Víctor Trujillo.

En el pasado reciente Trujillo ayudó al triunfo de Calderón al regañar en vivo a René Bejarano por operar a favor de AMLO haciendo acopio de dólares y con mayor eficiencia secretista; más adelante, con EPN en la Presidencia, Trujillo se puso al servicio de El Gang PRI-Televisa el no darle el mismo tratamiento al caso de superlativa mapachería electoral ocurrido en Veracruz; sigo preguntándome ¿Por qué el Brozo Trujillo no regañó a Rosario Robles, la madre de todos los mapaches del caso Veracruz, en vivo, a gritos y a nivel nacional con la frase ¡estamos hasta la madre de estos actos de corrupción!, como lo hizo con Bejarano?; y en el caso Veracruz, denunciado tímida e interesadamente por el neosocio panista del PRI, había cientos de bejaranos, cientos de mapaches y acarreadores de dinero y votos socios.

A pesar de esas debilidades e inconsecuencias Trujillo era, quizás, el comunicador de televisión que más aprovechaba las osadías que, por necesidad, tienen los pilares y defensores del orden social a la mexicana de dejar participar en su reino de las comunicaciones a conductores respondones para así ganar credibilidad al pintarse la cara de rectos liberales; pero cuando el conductor tocó intereses intocables se le acabó su libertad de expresión, ¡adiós al payaso contestón! Ya he dicho, claridosa y repetidas veces, que en el mundo liberal la libertad de empresa acabó con la libertad de imprenta...

Para mí no fue sorpresa que Trujillo, al fin sistémico, en vez de decir al público las causas del tajo a su derecho de ser un comunicador hocicón, solo dijo que el comunicado de la empresa esclarecía todo. Dicho comunicado, titulado Relanzamiento de noticieros Televisa “esclarece” que México y el mundo han cambiado y las audiencias demandan apertura y transparencia en la comunicación; que los pilares del relanzamiento serían Denise Maerker y Loret de Mola; que Lolita Ayala dejaba su noticiario de 29 años de buen rating, que López Dóriga conduciría dos programas semanales, que Paola Rojas tendría una revista de entretenimiento e información diaria. Después de enlistar a sus nuevas estrellas de la comunicación, Televisa expuso brevísimamente, el caso del estrellado Víctor Trujillo diciendo escuetamente que “Después de seis años de su segunda temporada El Mañanero entrará en un periodo de descanso a partir del 24 de junio”. Y tan tan.

A Brozo lo defenestraron debido a que la batalla por el 2018 está en su apogeo y la oligarquía mexicana y el ente “Televisa PRI-Gobierno” se preparan para mantener la oscura noche neoliberal asegurándose de tener en sus filas solo a fieles peones de la comunicación; en sentido contrario la izquierda electoral, no toda, se prepara para restituir la cara menos peor del capitalismo, la del estado de bienestar, el estado generador de clase media y no destructor de clase media como el actual estado priista. Los lobos y los tiburones, políticos empoderados y particulares sobre enriquecidos, están moviendo sus piezas y van con todo su poder egoísta para no permitir ni el más leve cambio social en México, ni siquiera el leve cambio al estado de bienestar que sigue siendo capitalista pero levemente menos inhumano.

 

Atentamente

Cándido Bonilla Jiménez.