Nuevo orden mundial

Editorial
31 marzo 2022

La Guerra en Ucrania marca el último gran cambio en la geopolítica internacional, el mundo se encamina a conformar un nuevo orden, algo que apenas podemos vislumbrar y no está exento de riesgos para la paz y para la democracia.

El Siglo 20 estuvo marcado por la Guerra Fría, la división del mundo entre países capitalistas y comunistas, que de alguna manera culminó con la caída del Muro de Berlín y poco después con el colapso de la Unión Soviética.

Con el ascenso de potencias como China, India, Rusia o regiones como la Unión Europea, y Estados Unidos como la gran potencia, el mundo entró en una época multipolar, donde los países velaban por sus propios intereses, protegidos por una relativa calma mundial.

Sin embargo, la invasión de Ucrania por los rusos ha marcado el fin de una época y el inicio de otra, un nuevo orden dividido por lo que algunos especialistas denominan “bloques de países”.

Estados Unidos, la Unión Europea, Oceanía, la mayoría de los países latinoamericanos, algunos países del Medio Oriente y Asia, y numerosos países de África conformarían uno de los bloques.

Otro de los bloques estaría integrado por China, Rusia, India, Irán, Siria, Corea del Norte, entre otros.

Sin embargo, la distribución geográfica obligaría a conformar bloques regionales de países unidos por riesgos muy específicos.

Hace unos días, Israel, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Marruecos se reunieron para pactar un bloque que los proteja de Irán, un ejemplo de cómo se irán agrupando los países.

La división implica conflictos, una mala noticia que pronostica más armas, más desconfianza y seguramente nuevas guerras futuras.