A la libertad de actuar, le colgamos todo aquello que coloquialmente podemos llamar ´hacer todo lo que nos de la gana´, cuando debemos asumir la responsabilidad de las consecuencias que generen nuestros actos

01 diciembre 2007

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Héctor Tomás Jiménez

Acerca de la libertad y las consecuencias de nuestros actos
"La libertad significa responsabilidad. Es por eso que la mayoría de los hombres la ignoran".
George Bernard Shaw


Los seres humanos mantenemos una actitud ante la vida dentro de esquemas de conveniencia. Por lo general, valoramos nuestros propios actos como buenos o bien intencionados, sin importar las consecuencias que éstos tengan en el resto de las personas, y lejos de valorar los actos de los demás, los juzgamos en función del nivel y grado de perjuicio o beneficio que de dichos actos obtengamos.
Así es como ejercemos nuestra libertad, pues la consideramos como un acto supremo que nos permite actuar y decidir de acuerdo a nuestra particular forma de pensar, omitiendo, por lo general, la responsabilidad de la que debe ir acompañada, ya que es esta la que nos frena o limita en nuestros deseos o intereses particulares.
A la libertad de actuar, le colgamos todo aquello que coloquialmente podemos llamar "hacer todo lo que nos de la gana", cuando debemos asumir la responsabilidad de las consecuencias que generen nuestros actos. De ahí el sentido de la conveniencia con la que vivimos, sin darnos cuenta que de alguna manera, la libertad es para los seres humanos un bien moral que desperdiciamos.
Por este particular modo de pensar, muchas veces omitimos aceptar que la libertad individual es la piedra angular sobre la cual se construyen todos los derechos y deberes de las personas y que debemos respetar y asumir con responsabilidad. De ahí que sea importante para toda sociedad el tener una idea común de libertad individual, pues p La libertad sin responsabilidad es otra cosa, algo muy parecido a la anarquía y el libertinaje.
De la libertad se han dicho muchas cosas, algunas de alto contenido romántico-filosófico como la que señala que: "La libertad es como un río que fluye sereno y sin trabas dando vida y contenido y que si adquiere fuerza, desborda su cauce y causa ruina, y si sus aguas se estancan, muere".
Pero al margen del sentido poético, es digno señalar que han sido muchos los hombres y mujeres que han trascendido por sus obras y que se han expresado en torno a este valor concepto.
Al excelso escritor de la lengua hispana, Miguel de Cervantes Saavedra, se le atribuye la frase que dice: "No hay en la tierra contento que se iguale a alcanzar la libertad perdida". A Mahatma Gandhi, por su parte, la frase que señala que: "No hay camino hacia la libertad, la libertad es el camino". A Goethe, la que dice: "La libertad es como la vida, sólo la merece quien sabe conquistarla todos los días". Otro grande del pensamiento Universal como es Montesquieu, se refirió a la libertad como: "Aquello que consiste en hacer lo que se debe hacer". El mexicano Octavio Paz, un hombre grande, poeta y escritor de nuestro tiempo escribió: "Sin democracia, la libertad es una quimera".
Por su parte, Madame Roland, al momento de ser sacrificada frente a la estatua de la libertad, dijo como frase celebre para la posteridad: "¡Libertad, libertad, cuantos crímenes se cometen en tu nombre!". Jean Paúl Sartre, filosofo contemporáneo y promotor de la idea del existencialismo, señaló en torno a este concepto que: "El hombre es un ser condenado a la libertad", en tanto que otro filósofo escritor contemporáneo a Sartre, como es George Bernard Shaw, dijo que: "La libertad significa responsabilidad. Es por eso que la mayoría de los hombres la ignoran".
Para concluir, debemos asumir siempre que el ejercicio de nuestra libertad implica previsión de consecuencias y responsabilización de nuestros actos, única vía para vivir en armonía y sana convivencia. ¿O usted, como la ve?

JM Desde la Universidad de San Miguel.
udesmrector@gmail.com