El éxito y el fracaso son tan solo una actitud
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Héctor Tomás Jiménez
"Una forma de conocer a alguien exitoso es acercarse para ver que transpira alegría, lo contrario sucede con una persona fracasada que solo exhala amargura".
Anónimo
El ser humano desde todos los tiempos ha sido consciente de que él es el artífice de su propia vida, de que son sus decisiones las que lo llevan a la realización sublime o a la mediocridad insensata.
Un poema de Amado Nervo intitulado En Paz, contiene un par de versos que son dignos de destacar al respecto y son los que dicen: "Porque veo al final de mi rudo camino, / que yo fui el arquitecto de mi propio destino", y lo son en función de que nos muestran que el poeta estaba consciente de que el éxito de su obra estaba fincada en él mismo y en nadie más.
En efecto, tanto el éxito como el fracaso son que el hombre construye a lo largo de su vida, y aunque son conceptos subjetivos, por el simple hecho de lo que alguien puede considerar que algo es de éxito, en tanto que otro puede verlo como un fracaso, lo cierto es que ambos son el resultado de las metas y objetivos personales de cada quien, habida cuenta de que cada objetivo logrado hace a la persona más feliz, o en el caso contrario, una persona frustrada, siendo ésta una de las principales diferencias entre estos dos tipos de individuos.
Es fácil identificar algunos rasgos de las personas fracasadas y sus diferencias con las exitosas. Según Dave Kerpen, orador internacional existen muchos hábitos que pueden llevarte tanto al éxito como al fracaso, dependiendo todo de la actitud. Estos son algunos:
"Una persona exitosa irradia felicidad porque se siente satisfecha en cada ámbito de su vida y sabe enfrentar los retos y las dificultades con ánimo mientras que una persona fracasada vive constantemente malhumorada y tiene una visión negativa de las cosas que la rodean.
Una persona exitosa es capaz de aceptar su responsabilidad cuando algo sale mal, a diferencia de una persona fracasada quien buscará culpar a los demás de sus fallas, y sin reparar los daños, dramatizará todo para llevarlo a un extremo.
Un hombre o mujer exitosos procuran alternar con personas que pueden ayudarlos a ser mejores cada día. Buscan aprender siempre de los mejores, mientras que una persona fracasada disfruta con el fracaso de los otros, no tiene la necesidad de crecer y se siente respaldada en su propio fracaso.
Aquellas personas que tienen objetivos claros y diseñan un plan para lograrlos, son personas creativas que ocupan su mente inventando estrategias y alianzas para alcanzar el éxito en tanto que las personas fracasadas gastan mucho tiempo en pensamientos negativos y en quejarse de toda situación, generalmente son personas de poca imaginación.
Las personas que lograron sus objetivos saben que no alcanzaron el éxito en solitario y generalmente agradecen a los demás por el esfuerzo colectivo. Las personas que rara vez alcanzan un logro suelen atribuirse todo el mérito.
El hombre con vida exitosa se ha ocupado de tener horizonte de futuro, es decir, imaginar un lugar o una situación de la cual se quiere disfrutar a mediano y largo plazo, en consecuencia con esto, lleva una agenda, a veces imaginaria con cada uno de los pasos que la llevarán a ese lugar. Las personas poco exitosas, por el contrario, suelen tener problemas con la planeación, incluso en su día a día.
Las personas creativas y exitosas requieren nutrir su mente y su espíritu realizando actividades recreativas como; leer sobre nuevos temas, ver películas constructivas o practicar alguna actividad al aire libre, mientras que las no exitosas, generalmente pierden el tiempo de manera improductiva.
Las personas exitosas también comenten errores y viven experiencias fuertes, pero a diferencia de las no exitosas, superan los obstáculos y pueden seguir adelante, es decir, son capaces de desarrollar resiliencia.
Las personas exitosas ven la responsabilidad como la clave del éxito ya que están conscientes de que el éxito es producto del trabajo y las buenas relaciones.
A las personas exitosas les gusta aprender mucho, sobre cosas que les representan retos y muestran interés en los conocimientos de los demás, mientras que una que fracasa constantemente, le tiene miedo al cambio y prefiere quedarse con ideas preestablecidas".
JM Desde la Universidad de San Miguel.
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