Helás

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"Helás" es el nombre que los griegos le dan a su patria. Cito a Wikipedia, siempre tan confiable: "Hélade, la tierra de los helenos, como se designaba a la Antigua Grecia, abarcaba una vasta zona geográfica que comprendía desde el Mediterráneo occidental (Marsella), hasta los confines del Oriente Medio, incluidas las islas griegas.
Esta civilización, que tuvo como origen las culturas minoica y micénica, conformó el conjunto de episodios políticos, económicos, sociales y culturales que se manifestaron en la cuenca mediterránea en el transcurso de los dos últimos milenios antes de nuestra era.
Si la civilización helénica, como tal, aparece durante los milenios 5 y 4 a.C., su última expresión se sitúa en el corazón del Egipto Ptolemaico el Siglo I a.C., antes de sucumbir bajo la dominación romana. A esta civilización se deben la mayor parte de las innovaciones políticas y culturales que cimentaron nuestra sociedad actual."
 
DESHELADIZADOS
Las palabras "Grecia" y "griego" son latinas. Los miembros de una tribu helena que emigró a Italia se llamaban a si mismos los "gracoli", que los romanos tradujeron como "graeci" y aplicaron a todo los helenos, aunque pertenecieran a otras tribus distintas.
 
BÁRBAROS
Para los griegos, los extranjeros eran todos aquellos que no hablaban su misma lengua y que pronunciaban sílabas sin sentido, algo así como "bar-bar-bar-bar...". Por eso los llamaron "barbaroy", "gente que habla de manera extraña".
 
RECETAS DE CABALLO
Aunque Grecia fuera la cuna de la filosofía y la democracia, sus remedios tradicionales para curar ciertas afecciones podían ser tan repugnantes o brutales como en cualquier otro lugar. Uno de los más populares remedios para curar la impotencia consistía en untarse el pene, los músculos perineales y el ano con una mezcla de aceite y pimienta en polvo, a la vez que se hacía una friega con un manojo de ortigas. El tratamiento resultaba algo doloroso pero, al parecer, los efectos eran casi inmediatos.
 
COMO TE VES, ¿ME VERÉ?
En cierta ocasión alguien le preguntó a Diógenes por qué los ricos daban limosna a los pobres, mientras que negaban su ayuda a los filósofos. El filósofo respondió: "Todos los ricos temen llegar a ser pobres, pero ninguno teme llegar a ser filósofo".
(Y yo recuerdo una anécdota atribuida al ex Gobernador de mi Sinaloa, Leopoldo Sánchez Celis, quien al final de su mandato se puso a gastar mucho dinero del erario en remodelar las cárceles del estado. Cuando un reportero le preguntó por qué mejor no remodelaba escuelas, don Polo contestó con su picardía característica: "Es que a la escuela yo ya fui".)
 
IDEALIZAR
Sófocles, que mantenía una rivalidad amistosa con su colega Eurípides, era criticado porque sus personajes masculinos eran demasiado perfectos, heroicos y virtuosos, hasta el punto de que los espectadores creían que era imposible imitarlos. En una ocasión, harto de los ataques, respondió: "Yo los pinto como tendrían que ser, no como son: para eso está Eurípides".
 
TROMPO ASTRAL
Anaximandro de Mileto, discípulo de Tales, fue el primer filósofo que dibujó en una tablilla la tierra habitada, concebía la Tierra como un cilindro flotante cuya superficie estaba habitada por los hombres, y afirmaba que las ardientes capas del universo estallan y toman la forma de ruedas de fuego que, envueltas en tubos de niebla, giran en torno a la tierra y el mar.
Los cuerpos celestes son agujeros en los tubos, a través de los cuales brilla el fuego encerrado en éstos.
Los eclipses, por tanto, se debían a la acumulación de materia en los agujeros, que se atascaban durante unos momentos. Anaximandro fue el primero en opinar que la Tierra no estaba apoyada en un soporte, sino que flotaba por sí misma.
 
PEQUEÑO ERROR DE CÁLCULO
Anaxágoras creía que la tierra y los demás cuerpos celestes eran muy parecidos, aunque las estrellas, los planetas y el sol ardían a gran temperatura. Según sus cálculos, el sol media unos 22.000 kilómetros cuadrados (menos que la extensión del estado de Nayarit).
 
Aplausos y chiflidos: gfarberb@yahoo.com.mx
Consultas: http://www.buhedera.mexico.com
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