Sin tiempo

El Centinela
14 octubre 2020

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Lejos de mostrarse convencida de rendir protesta en el Congreso del Estado como Alcaldesa sustituta, Pier Angely Camacho Montoya, quien recién enviudó de Carlo Mario Ortiz Sánchez, ex Alcalde de Salvador Alvarado, mostraba su pesar, pues apenas el 7 de octubre, hace una semana, perdió a su compañero de vida.

Camacho Montoya fue propuesta por el PRI y aceptada en el Congreso, era la única carta sobre la mesa y se aprobó, en un proceso donde se buscó la celeridad.

La pregunta es ¿si la ex primera dama de Salvador Alvarado necesitaba tiempo para estar con sus hijos y llevar un duelo?, pero ya no será posible, pues sus funciones como alcaldesa inician una vez tomada la protesta.

La trayectoria expuesta por integrantes de la bancada del PRI sobre la ahora cabeza del municipio del Évora no es cuestionable, sino las condiciones en que asume el cargo y se asumen enormes responsabilidades.


Gira artística

El Alcalde de Mazatlán, Luis Guillermo “El Químico” Benítez Torres, se dio la vuelta por la capital sinaloense para visitar el Congreso tras la donación de un terreno en el que está ubicado “el hospitalito” de Mazatlán.

Por lo menos eso es lo que argumentó, sin embargo, el discurso que manejó fue el de un aspirante a la Gubernatura, además de que ni alcanzó a llegar a la sesión, al parecer vino de gira artística.

Lo más destacado es que reveló que hasta el momento, el Carnaval de Mazatlán no se ha cancelado y piensa realizarlo bajo ciertos protocolos sanitarios, pero la cancelación no la puso como una opción.

El Alcalde estuvo arropado por algunos diputados y diputadas e hizo alarde de ser una de las personas pioneras de Morena en Sinaloa y su trayectoria en el partido, denostando aquellos y aquellas que consideró no morenistas y que se cuelgan para dar mala imagen a su gobierno o su persona.

Después de hacerse la víctima comentó brevemente que las encuestas lo han posicionado como uno de los personajes más populares que pudieran contender en las elecciones del 2021.

Lo extraño es que la sesión del Congreso inició mientras en Mazatlán todavía se sostenía una sesión de Cabildo y aún así decidió venir y presentarse frente a los medios para exponer todo lo que ha hecho por Mazatlán, lo que parecía más informe de Gobierno.

Claro, se le olvidó decir que la mayoría de las obras que presume las hizo el Gobierno del Estado..., pequeño desliz.

 

A control remoto

Y mientras el Alcalde porteño, Luis Guillermo “El Químico” Benítez, se placeaba en Culiacán tratando de mantener viva la quimera de ser el candidato a Gobernador por Morena, en el puerto los regidores a los que controla operaban en su favor.

A pesar de que 15 organizaciones civiles le dieron una lista de las razones por las que no debía de apoyar la reelección de Rafael Padilla en el Órgano Interno de Control, los regidores de “El Químico” lo eligieron.

Incluso la Síndica Procuradora, Elsa Bojórquez Mascareño, había dejado en claro que Padilla no cumple con el perfil para el puesto, y propuso a otra persona para el puesto, pero los regidores le siguieron el juego al Alcalde.

Qué está detrás de todo esto, una palabra fea que parece que no podemos erradicar de nuestros gobiernos: corrupción.


O cumplen... o cumplen

Ante el relajamiento de protocolos sanitarios en los negocios de Culiacán, la autoridad está viendo en la necesidad de entregar por escrito exhortos para que los cumplan.

El Ayuntamiento de Culiacán espera que con estos papelitos los comerciantes acaten las medidas impuestas por el sector de salud, para combatir el coronavirus en el municipio.

Los tapetes sanitizantes secos, el gel antibacterial diluido y la toma de temperatura en el brazo no son suficientes para frenar el virus, y esto está colmando la paciencia de las autoridades municipales.

Sin embargo, el Ayuntamiento también se ha visto muy tibio en el actuar contra estos establecimientos, hasta el momento no se ha comunicado sobre clausuras o multas por el incumplimiento de protocolos.

Esperemos que la autoridad no le afloje y los comerciantes prioricen las medidas preventivas ante el Covid-19, ya que si nos cuidamos entre todos, pronto saldremos de esto.


La rebelión de los hoteleros

Aunque consideramos que ya se estaban tardando, los miembros de la Asociación de Hoteles y Moteles de Culiacán salieron la mañana de este martes a cuestionar sobre la actuación del Gobierno del Estado en la repartición del fideicomiso que se alimentaba del Impuesto sobre Hospedaje que se cobra en Sinaloa.

Según explicaron, este impuesto de más del 3 por ciento, antes se administraba por un comité en el que participaban además de miembros del gremio hotelero, representantes de gobierno estatal y municipal.

Hasta ahí, todo bien. Los 12 millones de pesos reunidos, en promedio cada año, se reinvertían en campañas de promoción equitativas para Mazatlán, Los Mochis y Culiacán.

El problema es que la promoción como destino de negocios para Culiacán ha caído y se nota en la baja ocupación.

Aunque no dijeron nombres, la crítica se centró en la actuación del Secretario de Turismo, Óscar Pérez Barros, y la evidente inclinación que tiene para el turismo del puerto, en donde también obviamente tiene intereses.

Por eso, los hoteleros de Culiacán ya andan pidiendo un informe más detallado y justificado que el presentado por la Sectur, en el que no comprueban cuánto se ha recabado por cada municipio y cuánto se ha aplicado, en proporción.

Es obvio que se han invertido miles de millones de pesos para rehabilitar o guapear a Mazatlán, de donde es originario el Gobernador Quirino Ordaz Coppel, y es válido mientras la cosa sea pareja con el resto de los destinos turísticos.

También es cierto que los hoteles de Mazatlán son los que más dinero aportan, nadie lo niega, pero lo que reclaman los hoteleros de otras ciudades sinaloenses es que se les apoye a todos, de manera proporcional.