Familia pierde patrimonio tras enfrentamiento armado en Escuinapa

Carolina Tiznado
18 diciembre 2025

La familia Morales Ortega quedó en el desamparo luego de que un vehículo en persecución incendiara su hogar durante un choque armado en Escuinapa. Hoy solicitan el apoyo de la ciudadanía para reconstruir su vida

ESCUINAPA. _ La familia Morales Ortega no aparece en estadísticas oficiales ni en reportes de daños, pero es una de las afectadas directas del enfrentamiento armado registrado la mañana del miércoles en Escuinapa. El saldo para ellos fue la pérdida total de su vivienda y de los bienes que construyeron durante años de trabajo en el campo.

Los hechos ocurrieron poco después de las 07:00 horas. En colonias como Insurgentes, Roblito, Loma Bonita y Francisco I. Madero, el sonido de disparos a la distancia se ha vuelto recurrente; sin embargo, esa mañana la violencia se acercó de manera abrupta.

La familia desayunaba bajo un tejabán que utilizan como comedor en el patio, cuando el estruendo los sorprendió.

“Estábamos almorzando cuando de pronto sentimos el golpe en la pared. Yo estaba en la moto con mi nieto, queriendo sacarlo a pasear antes de irme a trabajar, cuando escuchamos el choque y luego los disparos”, relata don Celso Morales.

Un vehículo, presuntamente perseguido, se impactó contra la vivienda y se incendió, provocando que el fuego se extendiera hasta consumir la casa. La voz de don Celso se quiebra al recordar no solo el miedo, sino la angustia de ver reducido a cenizas el patrimonio familiar.

En cuestión de segundos, la familia corrió hacia la parte baja del terreno, donde tienen una vivienda en construcción. También intentaron auxiliar a Elizabeth, quien se encontraba en la habitación que recibió el impacto.

“Cuando todo se acabó subimos a echarle agua a las cosas, pero ya estaban incendiadas. No supimos cómo pasó todo; quisiéramos que nos ayudaran con la casa”, expresó Alondra, hija de don Celso.

En esta zona, la mayoría de las familias vive del trabajo agrícola y en empaques. Cada mueble y cada objeto representa años de esfuerzo. Al narrar lo ocurrido, las lágrimas surgen de forma involuntaria, el dolor es evidente.

Ese miércoles no solo fue sobrevivir entre disparos, sino escuchar cómo las pertenencias se consumían por el fuego.

“Corrimos a escondernos”, resume don Celso. Actualmente, la familia se encuentra alojada en casa de una comadre, quien les brindó refugio temporal. Reconocen que reconstruir solos no será posible.

La ropa de dos adultos y dos jóvenes, calzado, una motocicleta utilizada para trasladarse al trabajo, refrigerador, comedor, camas y otros enseres quedaron destruidos. La prioridad, dicen, es volver a tener un techo, aunque sea para dormir en el piso.

Este jueves 18 de diciembre acudieron a la Presidencia Municipal, donde les informaron que el caso tendrá seguimiento. La familia espera que el apoyo se concrete.

“Las balas me pasaban por un lado”

Estrella, otra integrante de la familia, estuvo a punto de perder la vida. Se encontraba en su habitación cuando el vehículo se impactó contra el cuarto, dejando un boquete en la pared.

“Estaba acostada, sentí el golpe, retumbó todo y me caí de la cama. No sabía qué pasaba y empezaron los disparos. Cuando intenté salir, sentía las balas por todos lados. Salí entre las balas”, narró.

El miedo persiste. Su perico murió a causa del calor y el humo, no alcanzó a llevárselo; perros y gatos lograron salir, pero la sensación de vulnerabilidad permanece.

La familia Morales Ortega es víctima colateral de la violencia, un caso que no siempre se cuantifica y que depende en gran medida de la solidaridad ciudadana para salir adelante. Solicitan apoyo con enseres domésticos, cobijas, colchones, camas, ropa, calzado (dama números 4, 4.5 y 5; caballero número 9), así como material de construcción, principalmente ladrillo. Aceptan donaciones aun cuando sean de segunda mano.

Quienes deseen apoyar pueden comunicarse directamente con la familia o realizar aportaciones a la cuenta Santander 5579 1003 6287 7456.