Muere padre de uno de los 3 jóvenes desaparecidos

06 noviembre 2015

"Tras casi 12 años de búsqueda, Juan Emerio Hernández fallece
sin hallar a su hijo."

Luego de más 11 años de búsqueda infructuosa de su hijo y dos sobrinos, la madrugada de ayer falleció de un infarto Juan Emerio Hernández Beltrán, siendo el segundo de los padres de los jóvenes desaparecidos de Las Quintas que muere sin encontrar respuesta.
La vida de Juan Emerio y la de su familia cambió de tajo la madrugada del 30 de junio de 1996, cuando su hijo Juan Emerio Hernández Argüelles y sus sobrinos Abraham Hernández Picos y Jorge Cabada Hernández fueron desaparecidos supuestamente por elementos de la Policía Municipal.
De oficio agricultor, tenía su residencia en la colonia Las Quintas y junto con su esposa Rosa María Argüelles de Hernández e hijos vivían con tranquilidad, pero desde el día de la tragedia ya nada fue igual.
Los tres primos hermanos fueron vistos por última vez en una fiesta de cumpleaños en la casa de Rolando Andrade, en Las Quintas.
Dentro de las investigaciones se conoció que durante el evento se suscitó un pleito entre los jóvenes, donde intervinieron los guardias del empresario y su hijo, Rommel Andrade.
Un día después trascendió que los primos habían desaparecido, y existían versiones de varias personas sobre la presunta participación de agentes de la Policía Municipal y de los guardias personales del empresario.
Durante las indagatorias se recabaron diversas evidencias en este sentido, y se lograron cinco órdenes de aprehensión contra supuestos indiciados, de las cuales se ejecutaron sólo tres.
Sin embargo todos los mandamientos judiciales se vinieron abajo mediante un amparo por falta de pruebas. Además los juzgados no otorgaron órdenes de arresto contra Rommel Andrade y el hoy finado Rolando Andrade.
Mientras tanto Juan Emerio, junto con su hermano Abraham Hernández Beltrán y cuñado Jorge Cabada Orduño, así como sus respectivas esposas, iniciaron una frenética búsqueda de sus hijos y exigieron a las autoridades esclarecer el caso.
Los días pasaron, luego los meses y nada, ahora son ya más de 11 años y los tres jóvenes desaparecidos no han sido localizados y mucho menos se han detenido a los responsables.
Durante una entrevista realizada el 30 de junio de 2007, Juan Emerio reveló que el Procurador de Justicia, Luis Cárdenas Fonseca escondía la cara para no admitir su desinterés por el caso, y la falta de resultados en el mismo.
El agricultor de 60 años, jamás se rindió en la lucha por encontrar a su hijo y tenía la esperanza de volver a verlo, pero ayer por la madrugada el destino lo alcanzó en su propio domicilio, de donde fue auxiliado por sus familiares en estado grave.
Juan Emerio es el segundo padre de los tres jóvenes desaparecidos que pierde la vida en medio de su lucha por encontrarlos, ya que el primero fue Jorge Cabada Orduño, quien murió a causa de un derrame cerebral derivado de un accidente vial en 1998.