Da Paola palos de ciego a la CEDH
Absurdo, deslegitimar a Óscar Loza

OBSERVATORIO
03/02/2025 04:02
    Es inadmisible que mientras Sinaloa logra dar un paso trascendente en favor de la defensa de las víctimas de la violencia sin precedentes derivada del choque frontal al interior del cártel local del narcotráfico, haya actores políticos que proponen la irrazonada regresión a la barbarie.

    Horas después de que el Congreso del Estado eligiera el viernes a Óscar Loza Ochoa, luchador social de toda la vida, para presidir la Comisión Estatal de Derechos Humanos, la Diputada y dirigente del Partido Revolucionario Institucional, Paola Gárate Valenzuela, les mintió a los sinaloenses al atribuir la decisión legislativa a causas ajenas a la gran trayectoria y respaldo cívico que hizo posible la designación. El exabrupto derivó de que la mayoría de los asambleístas no pusieron al frente de la CEDH a una de las aspirantes, Lucila Ayala de Moreschi, que es quien la líder priista quería que fuera designada.

    Es inadmisible que mientras Sinaloa logra dar un paso trascendente en favor de la defensa de las víctimas de la violencia sin precedentes derivada del choque frontal al interior del cártel local del narcotráfico, haya actores políticos que proponen la irrazonada regresión a la barbarie. La alegoría de la caverna que desde una visión fundada en la oscuridad de las catacumbas del poder pretende imponerle a la generalidad la realidad construida en la ceguera de uno solo.

    La intención de restarle legitimidad a quien ante los ojos de todos y los hechos fehacientes es el mejor Ombudsman que ha tenido Sinaloa así llueva, truene o relampaguee, equivale a apostarle a la indefensión social que deriva de la actual guerra criminal. Ir en contrasentido del denuedo ciudadano en construcción de paz, que logra colocar apenas el primer ladrillo del edificio de la civilidad y viene alguien queriendo demoler tan incipiente obra. Gárate sabe del apostolado de Loza, de la convicción y el sacrificio de éste, sin embargo, optó por el golpe bajo que es como la bala disparada en el pie propio.

    “La aplicaron otra vez! Morena elige como presidente de la #CEDH en Sinaloa al compadre del Gobernador, Óscar Loza. Entre familia y compadrazgo, Sinaloa se vuelve tierra de nadie! A pesar de tener una mejor opción con un excelente currículum, y la gran presencia social de @lucilaayaladem decidieron seguir fallándole al pueblo sinaloense”, escribió Gárate el viernes en la red social X, faltándole el respeto al decano y valiente defensor de derechos humanos.

    Paradójicamente, la legisladora del PRI utiliza a la inversa la misma situación que se dio en julio de 2022 cuando el Congreso descartó a Óscar Loza como aspirante a dirigir el Instituto para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas. En aquella ocasión se especuló que fueron las desavenencias con el Gobernador Rubén Rocha las que le evitaron acceder a este cargo. O sea si sucede una cosa, mal; si sucede otra, mal, en aras de figurar a través de la alteración de los hechos.

    Sí existe el compadrazgo entre Loza y Rocha, pero por encima de tal lazo de amistad predomina la digna hoja de vida de quien durante medio siglo se lo ha jugado todo en la defensa de los más vulnerables, poniendo en riesgo la seguridad personal y familiar con tal de proteger a personas o sectores en condición de fragilidad. Y si alguien requiere de mayores elementos de criterio allí están los siempre arropados por quien fue designado en la Presidencia de la CEDH: las madres que buscan a sus desaparecidos, los desplazados por la violencia, los indígenas que son parias en su propia tierra, los periodistas agredidos por los intolerantes, etcétera.

    No obstante, Paola Gárate le apuesta a ser la voz opositora que le aporta al miedo en vez de señalar desde la representación popular dónde están las puertas de salida. Es su derecho, su libertad de expresión, por supuesto, prerrogativas que les fueron garantizadas hasta a los vendedores de periódicos que en las madrugadas nos despertaban con sus altavoces y el “¡ándale!” con el cual expelían noticias que eran cóctel de sangre y miedo.

    Es su libertad por más que le urja estructurar la estrategia comunicativa equilibrando los claroscuros y reconociendo lo que la sociedad hace, lo que la gente quiere. Si pretende consolidar una carrera política, estar a la altura de quienes apuestan a que ella es contrapeso emergente y será opción en la boleta electoral de 2027, entonces debe pasar sus acciones y palabras por el filtro de la cautela y así los sinaloenses la identificarían como interlocutora confiable.

    Mientras Gárate lo hace así, que no nos tiemble la voz a los sinaloenses al salir en defensa de la acertada decisión del Congreso al determinar que Óscar Loza esté al frente de la CEDH durante los próximos cuatro años. No mientras al de Monteverde nada le tiemble al ir a amparar a los sin voz para denunciar, ni manos extendidas que los levanten de la opresión y desesperación.

    Reverso

    Siendo una mujer belicosa,

    Que lanzando golpes se sublima,

    En eso de golpear a Loza,

    Es como pegarse a sí misma.

    Conocer los tiempos

    Cada vez se aparta más Paola Gárate Valenzuela del Eclesiastés de la política que dice que hay tiempos para vociferar y tiempos para el planteamiento sensato; tiempos para subirse al ring y tiempos para bajarse; tiempos para decir lo que sea y tiempos para reflexionar antes de decirlo; tiempos para derribar al contrario y tiempos para tenderle la mano y se levante. Debería aprender más de sus correligionarios Paloma Sánchez, Erika Sánchez y Bernardino Antelo que presentan mayor estilo y colmillo en la encrucijada de sacar al PRI del atolladero electoral en que está.