De brazos cruzados

    El municipio de Mazatlán es dueño de varios inmuebles. Unos son de uso público, como las calles, avenidas, parques y áreas verdes, y otros del dominio privado, como el estacionamiento en el centro que le dieron en pago a NAFTA.

    Pues bien, dentro de los inmuebles de dominio privado del Ayuntamiento se encontraba uno que colinda con el estacionamiento de La Gran Plaza.

    Ese inmueble fue solicitado en donación por una asociación civil denominada “Don Bosco”, para que lo destinara a un fin específico, que nada tiene que ver con su comercialización.

    Como es usual, en la donación, el Ayuntamiento estableció una cláusula que dice que, si el inmueble donado se destinaba a un fin diferente al señalado en el contrato respectivo, el Ayuntamiento podía solicitar su “reversión”.

    La “reversión” consiste en que el Ayuntamiento vuelve a ser dueño del inmueble con todo lo que esté construido sobre el mismo.

    Pues bien, aprovechando que en el Ayuntamiento todo permiten y no pasa nada, resulta que, aunque es notoriamente ilegal, parece que Don Bosco “vendió” ese inmueble a un tercero (hay que ver qué notario público “formalizó” esa pendejada).

    El tercero (o Don Bosco en su caso), ni tardo ni perezoso, construyó sobre el inmueble un edificio de departamentos y loco de contento inició actividades comerciales para venderlos.

    Los departamentos no se han podido vender, pero no porque en el Ayuntamiento se hayan puesto vivos y hayan hecho su trabajo.

    No se han podido vender porque mediante solicitudes de información presentadas por nosotros, el Ayuntamiento se dio cuenta que le habían metido gol y habían destinado el inmueble a un fin distinto al fijado en la donación.

    Lo que sigue es que el departamento jurídico del Ayuntamiento presente las demandas correspondientes para lo siguiente: 1) Para que se declare la nulidad absoluta de la venta del inmueble donado (en caso de que se haya llevado a cabo) y/o 2) Para que se “revierta” la propiedad del inmueble donado a favor del Ayuntamiento.

    A pesar de que el departamento jurídico ya tiene años conociendo las irregularidades que le platico, no ha hecho nada.

    Llámelo usted negligencia, flojera, no saben cómo hacerle o corrupción, pero el Ayuntamiento no ha movido un dedo.

    Digo, si tanta falta les hace el dinero para pagarle a NAFTA, el Ayuntamiento puede recuperar la propiedad del inmueble donde se construyeron los departamentos ¡¡y puede venderlos a muy buen precio!!

    ¿Por qué no han hecho nada? Eche usted a volar su imaginación.

    Por lo pronto, por andar de brazos cruzados, los servidores públicos responsables de hacer lo necesario para recuperar el inmueble donado a Don Bosco, ya incurrieron en faltas administrativas y hay que denunciarlos.

    Periodismo ético, profesional y útil para ti.

    Suscríbete y ayudanos a seguir
    formando ciudadanos.


    Suscríbete
    Regístrate para leer nuestro artículo
    Esto nos ayuda a identificarte mejor al poder ofrecerte información y servicios justo a tus necesidades al recibir ayuda de nuestros anunciantes.


    ¡Regístrate gratis!