El que avisa no traiciona, y justo después de la reforma energética se viene ahora la reforma electoral, en donde según palabras de nuestro Presidente lo que se busca es “que haya una verdadera democracia”. Curioso juego de palabras el utilizado por nuestro Presidente, dando a entender que no vivimos en una verdadera democracia. Incluso el Mandatario señala que quiere un INE “verdaderamente ciudadano”.
Democracia es de esas palabras que escuchamos mucho, constantemente es pronunciada por nuestros políticos/gobernantes, especialmente en periodo de elecciones. Usted ya sabe que de acuerdo con su etimología demos, Kratos y el sufijo ia, es decir, pueblo, gobierno y cualidad, esto lo podemos ver como algo meramente académico, por lo que mejor vayamos a lo señalado por el doctor Adam Przeworski, quien señala que un país vive en democracia cuando el país tiene certidumbre sobre las reglas aplicables para todos, pero incertidumbre sobre la persona que obtendrá el triunfo, y en México podemos afirmar que gracias al INE (que lo hacemos todos) tenemos certeza sobre las reglas del juego, incluso tenemos certeza de la manera en que tiene que actuar el árbitro (entendiendo que el árbitro puede ser el INE o incluso el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación), pero no tenemos certeza de quién obtendrá el triunfo.
Curiosamente durante años sí tuvimos esa certeza en nuestro País: no importaba quien era el candidato, importaba el partido por el cual era postulado. Nuestro Presidente añora el pasado, esto se puede observar en su día a día, en sus remembranzas de tiempos “mejores”, será que quizá con su reforma también quiera volver al pasado.
Veamos de manera rápida algunos puntos sobre esta reforma.
Empecemos por señalar que esta reforma fue presentada por los titulares de Aduanas y de la Unidad de Inteligencia Financiera, Horacio Duarte Olivares y Pablo Gómez, esto me parece muy llamativo. La reforma desaparece el INE, así como los 32 OPLES, es decir los organismos Públicos Locales Electores (encargados de las elecciones locales, aunque pueden actuar junto el INE) y se crea el Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC).
También elimina los Tribunales Electorales Estatales y que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación realice esas funciones.
Bajo un argumento de austeridad (después de haber pedido la realización de una consulta de revocación de mandato con un costo de más de mil 500 millones de pesos se ve algo endeble ese argumento) pide remover al aparato administrativo electoral, es decir, de los 11 consejeros actuales sean solo 7 y que tanto los consejeros como magistrados del Tribunal Electoral sean electos por voto popular a partir del próximo año.
La elección de estos magistrados será a través de listas de candidatos propuestos por el Poder Legislativo (mayoría Morena), el titular del Ejecutivo (Morena) y la SCJN (tres ministros propuestos por el Presidente).
También se eliminan las representaciones del INE en los estados. Y de 500 diputados actuales se reducirían a 300 y de 128 senadores a 96.
Eliminaría el financiamiento público ordinario a los partidos, es decir, que los partidos no reciban apoyo por parte del estado sino en años electorales para campaña y que los partidos cubran sus gastos a través de sus simpatizantes y militantes (se ve interesante).
Y se propone modificar el porcentaje para que una revocación de mandato sea vinculante: en la actualidad es el 40 por ciento, en la propuesta se baja al 30 por ciento. Estos son algunos de los puntos de esta reforma, que sin duda volveremos a tocar en este espacio.
Veremos si esta reforma se aprueba, ya que tanto PAN, PRI y PRD han señalado que no aprobarán ninguna reforma a la Constitución que no sea discutida y consensuada con ellos, curiosamente esta misma semana la Fiscalía General de Campeche señaló que le abrió una carpeta de investigación a Alejandro Moreno (presidente del PRI) por el delito de enriquecimiento ilícito. ¿Será que esto cambie la votación del partido?
Antes de finalizar, es necesario mencionar el juicio político en contra del actual Presidente Municipal de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro, al que el pasado 28 de abril le notificaron dicho proceso, por lo que está dentro de sus siete días naturales para contestar. El juicio deriva legalmente “al parecer” por el actuar del Alcalde en el tema de las viudas de policías, no aplicación del descuento en el pago del agua y algunas recomendaciones de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, que al parecer estas recomendaciones ya fueron solventadas. El juicio, por otro lado, “al parecer” deriva políticamente de las diferencias constantes entre el Presidente Municipal, el Congreso del Estado y el actual Gobernador.
PD. El INE (ese mismo que quieren desaparecer) esta semana a través de la Comisión de Quejas y Denuncias ordenó a Morena (el que lo quiere desaparecer) suspender la campaña de “odio, violencia y persecución política” en contra de los legisladores que votaron en contra de la reforma eléctrica, alegando que estas acciones solo incitan a la violencia.
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