CFE corta energía eléctrica del acueducto Baluarte-Escuinapa; 35 mil habitantes resultan afectados

ESCUINAPA. _ La mañana de este viernes, la Comisión Federal de Electricidad cortó la energía eléctrica del acueducto Baluarte- Escuinapa, por lo que se pararon los sistemas de bombeo, dejando sin agua potable a alrededor de 35 mil habitantes de la ciudad.

Se suma además a la falta de agua potable en las comunidades del valle, que desde hace 17 días padecen la situación, debido a las inundaciones del huracán “Pamela”.

De acuerdo a testigos, CFE llegó alrededor de las 10:00 horas, y aunque el Ayuntamiento envió a personal de Seguridad Pública al lugar para impedir el acto, no pudieron hacer nada debido a la incompetencia ante un ente federal.

Los cortes de energía eléctrica han sido frecuentes en esta administración pública, debido a que se dejó de pagar el servicio cuando dirigía la paramunicipal el primo del Alcalde Emmett Soto Grave, Juan Manuel Grave Inda.

Este demando a CFE ante Profeco para que no se cobrara el consumo en base a historial de lecturas, pedía que fuera con medidor; el asunto se extendió un año, tiempo en que no se pagaron los que inicialmente eran más de 500 mil pesos y se convirtieron en 600 mil pesos al tener medidor.

Ante la falta de pago vinieron los cortes y el Ayuntamiento determinó pedir un amparo federal contra la empresa de energía, así como colocar personal de Seguridad Pública para evitar que llegaran a realizar la suspensión.

Aunque CFE cortaba, se presume que la Jumapae se reconectaba de nuevo de manera ilegal, mientras la cuenta por consumo de energía eléctrica ha ido subiendo.

En la semana, el Gerente de Jumapae, Geovanni Saracco Martínez, señaló que se adeudan 7.5 millones de pesos, no 13 millones de pesos, y que no hay recursos para pagar.

Además del corte de energía, Jumapae mantiene desde hace un mes protestas de los trabajadores que inició como huelga y al declararse inexistente, continuó como paro laboral.

Ante la falta de respuestas, la mañana de este viernes los trabajadores cerraron con candados las puertas de la paramunicipal, las que se habían mantenido abiertas para que se pudiera cobrar el servicio y con el ánimo de no afectar a la población.

“Lo que no queremos es que se lleven lo que se recaude, no estamos afectando a la población porque no se ha dejado de trabajar en los servicios”, dijo el Secretario General, Diego Armando Rincones Altamirano.