El gobierno que nos merecemos

¿Qué nos jugamos?

El tren de México avanza inexorablemente a la próxima estación: las elecciones del 6 de junio. Nunca antes había sido tan importante votar por los diputados y gobernadores, la renovación del congreso es decisiva para balancear los 3 poderes y que no se rompa el puente entre las instituciones.

De romperse sería otra crónica anunciada que puede llevar a México al colapso por una serie de eventos desafortunados que lo indican como la flecha en el camino.

Es necesario evitar que el poder se consolide en manos de un solo hombre que lo manipula, todos sabemos que el poder absoluto corrompe aún más.

Nos jugamos que se maneje y se vigile el presupuesto responsablemente: el botín o el resorte del progreso que urge, nos jugamos que no se rindan cuentas y que los políticos se hagan responsables de sus actos y se aplique la justicia tan prometida para evitar más corrupción y nepotismo y restarle poder al ejército.

Que no se siga gastando opacamente ni en caprichos no rentables ni en decisiones tan costosas; necesitamos ser más competitivos reforzando a las empresas, el empleo y las exportaciones; necesitamos aumentar la educación y la tecnología claves del progreso, detener la pobreza y abatir la inflación que resta poder adquisitivo.

Nos jugamos que el narcotráfico aumente su poder con los “abrazos” y con ello más violencia o sentirnos más seguros. Nos jugamos perder nuestros valores, comprar medicinas y más vacunas fortaleciendo al sector salud público y privado, lo prometieron quitando los fideicomisos.

No queremos perder la libertad que siempre hemos gozado y parecernos a Venezuela que recorrió antes caminos parecidos ¿Tú crees que ellos se imaginaron todo lo que se les venía encima? Fueron engañados y vendieron sus votos por lentejas sin importarles, ahora no pueden evitarlo: el ejército se los impide.

Porfirio Muñoz Ledo un líder morenista de izquierda lo advirtió severamente ante el congreso “México está llegando a una bifurcación de la historia, a un momento de no retorno entre la democracia o el autoritarismo. Estamos ante un grave peligro de ruptura del orden constitucional”. ¿Qué tan cierto es lo que dijo? ninguno de los diputados presentes lo negó.

Puedes ser de izquierda o de derecha, de arriba o abajo, pero vamos juntos, el tren de México camina inexorablemente, lo que tú hagas nos afecta a todos.

Cumplir su agenda

Morena ha venido cumpliendo su agenda influenciada por el Foro de Sao Paulo, líderes de 8 países son miembros y gobiernan actualmente aplicando sus recomendaciones para implantar el socialismo democrático: transformar a México creando el efecto dominó por su liderazgo, encarcelar a algunos para aparentar la justicia prometida sin molestar a los peces gordos ni a los capos, crear la Guardia Nacional, comprar al ejército, sentirse víctimas, crear y culpar enemigos sin hacerse responsables ni resolver los pendientes, prometer, distraer la opinión pública, dividir, crear resentimientos, confundir los valores para perder el norte como el aborto, LGBT; adoctrinar cambiando los libros de texto, comprar votos y aumentar la clientela electoral con el presupuesto usando a los ‘servidores de la nación’.

Trabajan intensamente con prisa para sumar y mantener su poder siguiendo la consigna de Lenin “pinchad con vuestra bayonetas y no deteneos hasta que encontréis duro”, no lo soltarán fácilmente. Sorprende su creatividad para buscar leyes secundarias y crear otras para restarle poder al poder judicial, a instituciones autónomas; al INE lo sentenciaron, si pierden terreno irán contra él, Ricardo Monreal trabaja en una nueva ley para acotar el poder del Tribunal Electoral que piensan aplicar después de las elecciones. ¿Y el pueblo? Lo usan.

Muchos ven muy grave lo que viene, otros apoyan al gobierno, hay decepcionados, la gran mayoría es indiferente, dormidos, cansados, esperando llegar a casa, así iban en el vagón... y ocurrió la tragedia tan anunciada. Todos oían diario el rechinar del tren y vieron otros accidentes este 2021, pero no les importó. Esto nos revela: nos dice cómo somos.

Urge aprender a organizarse para usar el gran poder ciudadano civilmente y parar y cambiar lo que nos impide progresar y vivir en paz. Sorprende la cantidad de nuevas asociaciones activas trabajando para rescatar a México en las redes, por eso quieren controlarlas. Ni las protestas, ni las diatribas, ni las marchas cada vez mayores cambian nada.

La democracia no es para todos ni todos la desean, así está México, por eso tantos contrastes, el común denominador son el rezago educativo y la pobreza, mientras más crezca más manipulables son, por eso “esta crisis nos vino como anillo al dedo para afianzar el propósito de la transformación”.

Si te vale o vas en contra o los apoyas, recuerda que si cae el Metro nos caemos todos. Actúa bien.

paulchavz@gmail.com