|
""

"En Iztapalapa, la Pasión de Cristo se vive sin público"

"La iglesia y el gobierno desarrollaron un operativo para que se llevara a cabo a puerta cerrada la famosa representación que inicia el Domingo de Ramos y continúa toda la Semana Santa hasta el Domingo de Gloria"

A lo largo de 177 años se ha representado en Iztapalapa la Pasión de Cristo, una de las máximas celebraciones de la Iglesia Católica, con la que se conmemora la muerte y resurrección de Cristo.

La más famosa representación del calvario del hijo de Dios en México este año por primera vez se realizará pero sin público.

La iglesia y el gobierno desarrollaron un operativo para que se llevara a cabo a puerta cerrada la famosa representación que inicia el Domingo de Ramos y continúa toda la Semana Santa hasta el Domingo de Gloria.

Es paradójico que el origen de esta conmemoración en 1843, cuando se realizó por primera vez en el pueblo de Iztapalapa, se hizo como una plegaria al Señor de la Cuevita, una imagen que venera esa comunidad desde la época de la Colonia, para que se acabara la epidemia de cólera que mató a más de la mitad de los 10 mil pobladores de esa zona.

En pago al milagro de salvarlos de la epidemia, los pobladores prometieron escenificar La Pasión de Cristo. 177 años después es la pandemia del coronavirus la que impidió por primera vez en casi dos siglos que el público participara de la representación.

El director de cine mexicano Nicolás Echeverría, en 1995 filmó en el documental La Pasión de Iztapalapa el proceso que viven más de 500 actores que se preparan para interpretar a cada uno de los personajes que intervinieron en los aciagos días que presidieron la muerte del Mesías.

El creador de la película Cabeza de Vaca filmó los ensayos que se realizan durante los meses de preparación y mezcló momentos de la escenificación real con los ensayos, en los que entrevistó a los actores que son vecinos del pueblo de Iztapalapa, que viven uno de los grandes honores de los habitantes de esa demarcación al ser seleccionados para esa importante tarea dentro de la comunidad.

Este año tampoco pudieron participar los cientos de nazarenos que acompañan, cargando su cruz, al protagonista de esta puesta en escena monumental.

Los alrededor de 2 millones de espectadores que presencian las escenificaciones del Viacrucis este año no asistieron, pero la devoción hizo que los pobladores de Iztapalapa la realizarán por primera vez sin público.

 

Periodismo ético, profesional y útil para ti.

Suscríbete y ayudanos a seguir
formando ciudadanos.


Suscríbete
Regístrate para leer nuestro artículo
Esto nos ayuda a identificarte mejor al poder ofrecerte información y servicios justo a tus necesidades al recibir ayuda de nuestros anunciantes.


¡Regístrate gratis!