|
""

"Homeopatía Siglo XXI"

"Fatalidad de persistencia"
07/11/2015 10:28

    Carlos Calderón Ojeda

    Decía el maestro Proceso Sánchez Ortega, eminente homeópata mexicano, que el hombre estaba impulsado por una fatalidad de persistencia, es decir, quiere vivir y aspira a la eternidad.
    Porque sabe que habrá de morir desea fervientemente que haya otra vida y guarda esa esperanza, ese solo anhelo ya trasciende la muerte. Por supuesto en el caso del hombre este es un asunto ontológico.
    Los virus, las bacterias, los mosquitos, no escapan a esta fatalidad, no en el sentido mismo del hombre, pero sí en cuanto a una persistencia instintiva como especies, por lo mismo al ser atacadas por fuerzas enemigas (para ellas, como son los antivirales, antibióticos y fumigantes), se defenderán haciendo cambios en su estructura molecular, ADN, etc. Haciendo mutaciones, las que sean necesarias para... persistir.
    El hombre, la medida de todas las cosas según el sofista Protágoras, el mismo que ha hecho avances tecnológicos admirables e importantes para la humanidad, no ha logrado ser mejor como persona que el hombre de otras épocas pasadas, continuamos sumergidos en la crueldad, la envidia, la soberbia, la ignorancia, los odios y resentimientos, independientemente de las deficiencias genéticas de cada quien, estas fallas en nuestra personalidad son la verdadera enfermedad de la que hay que curar al hombre.
    Esto no es mera retórica, así piensa la homeopatía, si el hombre no cambia vamos hacía la autodestrucción, pero mientras hay vida, hay esperanza. La genética mórbida, más nuestra personalidad enferma, hacen que exista el fenómeno de la predisposición, y la consiguiente susceptibilidad para adquirir cualquier enfermedad infectocontagiosa y de cualquier otro tipo, el multimencionado virus de la influenza H1N1, no posee un poder incondicional para enfermarnos, a menos de que nuestro organismo esté predispuesto para ello.
    Además, debemos ser respetuosos de la naturaleza porque al final de cuentas ella es la que hace, da forma y cura las enfermedades, ya lo dijo el maestro Kumate en días pasados, hombre de gran entendimiento y sabiduría, que el calor y las lluvias próximas en Sinaloa auto limitarían el problema, en verdad felicito su lucidez intelectual, pues también le apuesta a la naturaleza.
    Por último, sólo decirles que la homeopatía cuenta con recursos terapéuticos suficientes, tanto en el sentido preventivo como en el tratamiento de los enfermos de influenza, llegado el caso.

    Comentarios: Carloscalderon1000@hotmail.com