No quiero que me digas.

    Estoy cansado, me siento viejo.

    No quiero que me digas

    que he cambiado con el tiempo

    que soy vaso de agua

    vacío en su interior

    no quiero que me digas

    que soy paloma sin alas

    que los sueños ya no sirven

    para alcanzar el cielo,

    ya no quiero que preguntes

    preguntas sin respuesta

    que murieron machacadas

    letra por letra,

    ya no quiero ser

    compañera de invierno

    vestida de tardes grises

    y lluvia que hace charcos

    en las calles andadas,

    ya no quiero eso

    ya no quiero nada

    ni ser un crucigrama

    que puedas resolver.

    Ya no quiero que me digas

    que no somos los que somos

    que somos inventados

    que vamos a la deriva

    en el fuego que se aviva

    y se apaga con el agua,

    solo quiero que sonriendo

    no te diga, ni me digas

    nunca adiós.

    “No quiero que me digas... Estoy cansado, me siento viejo... No quiero que me digas... que he cambiado con el tiempo...”.
    Periodismo ético, profesional y útil para ti.

    Suscríbete y ayudanos a seguir
    formando ciudadanos.


    Suscríbete
    Regístrate para leer nuestro artículo
    Esto nos ayuda a identificarte mejor al poder ofrecerte información y servicios justo a tus necesidades al recibir ayuda de nuestros anunciantes.


    ¡Regístrate gratis!