‘El acuario hará época como ningún otro’

Lo que hace sentir diferente al nuevo Acuario de Mazatlán con cualquier otro

que exista en el mundo, es el diseño que fusiona objetos hechos por el hombre con la naturaleza.

“Es un acuario que hace época como ningún otro”, asegura Minamino Yasuhiro, representante de la empresa japonesa Nippura, responsable de la fabricación en Japón de todos los acrílicos para las peceras de exhibición del nuevo acuario, así como de la transportación a Mazatlán e instalación de los mismos.

Minamino señala que la empresa es exitosa, y más de 100 trabajos alrededor del mundo comprueban su alta especialización. Siempre han recibido muy buenos comentarios en todos los lugares donde han realizado sus trabajos.

Él tiene 10 años trabajando para Nippura, pero la compañía nació en 1969. Minamino es serio, da pocos detalles de lo que hace en el Nuevo Acuario de Mazatlán, ya que son muy cuidadosos -y celosos- al hablar de los materiales y herramientas que utilizan, ya que son procesos y tecnologías desarrolladas por ellos, pero el éxito de la compañía que representa demuestra que el trabajo que suelen hacer es impecable.

“Estamos participando en el acuario, especialmente nosotros que somos los responsables de instalar los grandes acrílicos de las exhibiciones”, menciona.

Minamino detalla que ha trabajado en más de cinco países, pero es la primera vez que visita América Latina, señala que trabajar en cada lugar tiene sus diferencias, sobre todo en temas de cultura y tradiciones.

Él ya tiene meses en Mazatlán, reconoce que le gusta la ciudad y el ambiente, pero en sí, trabajar aquí ha sido complicado, dado que no encontraron los materiales que suelen emplear, situación que atrasó la instalación de algunos acrílicos.

Para ellos no es opción hacer las cosas de manera distinta, tiene que ser con el material que ellos emplean debido a la garantía que les ha dado durante toda la vida de Nippura, es por eso que, además de los acrílicos, todas las herramientas y materiales de instalación se trajeron directamente de Japón, pero no es algo que solo pase en México.

“Sí ha sido complicado, por los materiales, no encontramos los materiales que queremos en este País, tuvimos que traer de Japón todo lo necesario, en otros acuarios también nos ha pasado”, explica.

Su forma de trabajar es singular, al momento de poner los acrílicos, les piden a todas las personas ajenas a la empresa que se retiren del lugar, esto con la intención de mantener en secrecía la instalación del mismo.

Minamino menciona que ya va a un 70 por ciento del trabajo realizado, esperan que para junio ya hayan culminado con la instalación de todos los acrílicos y como siempre, espera que sea todo un éxito, como en los más de 100 acuarios donde han trabajado alrededor del mundo.

Sobre su estancia en Mazatlán y el acuario, sostiene que ha trabajado muy cómodo aquí y que esta infraestructura en la que trabaja, integra a la perfección al hombre con la naturaleza. “La cultura y el idioma de mi trabajo en Mazatlán es muy diferente al de Japón, y fue difícil comunicarse y cooperar con la gente local para construir un acuario. Sin embargo, todos son amables y muy libres de estrés y pueden hacer el trabajo”, comparte.

Nippura ha fabricado los acrílicos para todas las exhibiciones del nuevo acuario de Mazatlán. En total, son más de 148 toneladas.

La ventana de la gran pecera oceánica, la exhibición más grande, mide 13 metros de base por 7 metros de altura, con 48 centímetros de espesor y pesa 40 toneladas.