Debe analizarse a empresas beneficiadas con incrementos en costos de Obra Pública: Observatorio Ciudadano de Mazatlán
MAZATLÁN._ Ante la realización de convenios modificatorios en los que el costo de los proyectos de Obras Públicas sufren incrementos en el presupuesto inicial, Gustavo Rojo Navarro, director de Observatorio Ciudadano de Mazatlán señaló que se debería analizar qué empresas resultaron beneficiadas.
“Creo que aquí es importante analizar las empresas que fueron beneficiados en su momento con este tipo de prácticas y sacar las estadísticas y la tendencia”, precisó.
“Tendríamos que analizar el contexto de cada uno de los convenios, si fue en monto, porque se está solicitando el incremento de ese monto en específico, cada uno de los convenios modificatorios debe de reunir ciertas características, entonces deben estar debidamente justificados, pero sobre todo deben llevar el fundamento jurídico que avala la elaboración de ese convenio modificatorio”, expuso.
En el caso de los casi 100 millones de excedente de gasto en Obras Públicas por parte del Gobierno Estatal, encabezado por Rubén Rocha Moya, recomendó revisar cada una de las obras en las que se dio algún tipo de convenio modificatorio, para ver si efectivamente reunieron los requisitos para hacerlo.
Así mismo explicó que una obra pública según la ley, debe de pasar por tres etapas. La etapa de la planeación que es donde se hace el proyecto ejecutivo de la obra; posteriormente pasa a la etapa de presupuestación, que es donde se le asigna el recurso por todos los conceptos que van dentro del proyecto que se presentó; y finalmente la etapa de la ejecución, que es donde regularmente se dan los incrementos.
“Si ya pasó por la etapa de planeación y presupuestación habría que analizar porque en la etapa de ejecución está incrementándose a ese costo, si se supone que ya viene de una planeación que dio origen a que se le asignará el recurso. Entonces hay que analizar toda esa parte para ver las condiciones en las que están proponiendo esa modificación al monto ya asignado originalmente a la obra”, mencionó.
Rojo Navarro dijo que la Ley de Obras Públicas prevé cierto tipo de modificaciones que se pueden hacer a los contratos, pero cada una de esas modificaciones tiene sus características específicas, y esto se contempla en el artículo 84.
El primer convenio que maneja este artículo es el convenio de diferimiento, qué se hace cuando no se firma el contrato en tiempo y por lo tanto se tardan en dar el anticipo, entonces el contratista tiene que recuperar ese tiempo; también se puede modificar el plazo, si por alguna circunstancia, el contratista no empezó en tiempo establecido o por situaciones ajenas a él puede modificar también el contrato mediante un convenio modificatorio en plazo.
“Otro modificatorio es cuando por alguna circunstancia el monto de contrato va a variar, en este caso, si hay algún ajuste de costos por la situación de la inflación que están fluctuando los precios de los materiales, se puede llevar a una propuesta para modificar el convenio en monto o si por alguna situación va a haber alguna ampliación de la obra en donde van a requerir hacer un poco más de lo que se había planeado originalmente, también se puede modificar tanto el plazo como el monto siempre y cuando lo dice la ley no sobrepasen el 25 por ciento ni del plazo establecido ni del monto establecido originalmente”, detalló.
“También hay convenios especiales que se hacen cuando hay situaciones muy específicas que tienen que llevar a la modificación del contrato. Esto se hace mediante un procedimiento, se tiene que hacer un dictamen en el cual se justifiquen debidamente, que vaya bien fundado y motivado, se presenta al Comité de Obras Públicas y el comité en sesión lo revisa y analiza las situaciones si ellos pueden autorizar o no pueden autorizar la elaboración de este tipo de convenio modificatorio”, explicó.
En cuanto a cómo afectan estas prácticas en los concursos de licitación, Gustavo destacó que lo ideal es que al momento de elegir a la empresa ganadora en un concurso de licitación no solo debe depender de la parte económica sino tomar en cuenta el historial de cumplimiento de las empresas.
“Hay que mencionar que la mejor opción no siempre sea más barata, influyen ciertos factores que complementan. Por ejemplo la empresa que concursa cuál es su currículum en el nivel de cumplimiento que ha tenido con otros contratos, y efectivamente hay que analizar a detalle el por qué se da el incremento en las obras”.
La nueva Agenda Ciudadana en Mazatlán dará seguimiento al Programa Anual de Obra Pública
Derivado de todas estas prácticas que Observatorio Ciudadano de Mazatlán ha identificado en el tema de obras públicas, en la Nueva Agenda Ciudadana para la administración 2024-2027, buscarán dar seguimiento al Programa Anual de Obra Pública.
“Estamos planteando que se cree una forma de darle seguimiento al Programa de Obras Públicas, ya sea mediante un micrositio o algún sistema especializado, pero lo que queremos es estar monitoreando que del plan que se presenta para realizar obras públicas en el año, cuál es el comportamiento en ejecución de esas obras. Ver al final del año, cuál fue el porcentaje de cumplimiento de esas obras y si hubo modificaciones, porque se hicieron esas modificaciones”, señaló Gustavo Rojo Navarro.
Otro compromiso que están planteando, es que se haga un listado de aquellos contratistas que incumplen con los contratos o que se retrasan para tener conocimiento de ese tipo de empresas y ver si aún con eso se les siguen otorgando contratos, además de observar de cerca las adjudicaciones directas.
“Otro punto muy importante también que estamos planteando como compromiso es que a todas las adjudicaciones directas, les anexen el estudio de mercado para saber cuál fue la razón de por qué están asignando ese contrato por adjudicación directa, si las condiciones del mercado fueron las mejores las que propone esa empresa y por eso les otorgaron el contrato para adjudicación directa”, externó.
Esta vendría a ser una herramienta de transparencia y rendición de cuentas en donde el ciudadano pueda tener a la mano la información de todas aquellas obras que se van a realizar en las colonias, pues históricamente se ha encontrado que del plan original se realiza menos del 50 por ciento de las obras.
“Históricamente hemos detectado que el plan que se publica al inicio del año solamente un porcentaje muy bajo de las obras que se planean para este año se ejecutan realmente. El plan tiene modificaciones hasta el 60 por ciento de las obras que originalmente lo integran, esto quiere decir que tan solo el 30 por ciento de las obras que originalmente se plantea son las que realmente se hacen y el resto se cambian”.
“Entonces si tenemos un sistema de seguimiento en el plan anual de obras públicas, todos los beneficiarios de esas obras, les podemos dar seguimiento puntual y en caso de qué de repente veamos que ya no aparece esa obra, pues pedir la justificación del por qué están quitándola del plan, si ya estaba contemplada para realizarse en este ejercicio en específico”.
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