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PANDEMIA

Jesús Guadalupe, joven con parálisis cerebral en Mazatlán, casi muere de Covid, sobrevive y logra vacunarse contra el coronavirus

A sus 19 años de edad acude al Centro de Convenciones a vacunarse, se terminan las dosis para rezagados, pero el personal a cargo hace una excepción y lo vacunan

Hace tres meses el Covid-19 por poco le arrebata la vida a Jesús Guadalupe, que padece parálisis cerebral, pero afortunadamente con la ayuda de sus padres, logró salir adelante, y el martes por fin se vacunó contra esta enfermedad.

Jesús tiene 19 años, la primera dosis no pudo aplicársela dado que enfermó de Covid-19, mal que lo dejó en cama por meses, y con un pronóstico no muy alentador.

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Heriberta Osuna, madre del joven, comparte que fueron días difíciles cuando él contrajo el virus, dado que no parecía mejorar, sin embargo logró salir adelante.

A él ya le pegó coronavirus y se me vio, ya para la muerte, nos pusimos todos muy mal aquí por él, casi se nos va, hace como tres meses”, menciona.

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“No podía comer, la neumonía le dio calenturas, convulsiones... nosotros sentimos cualquier cosita con el Covid y poco o nada, pero ya teníamos la vacuna, la primera y segunda dosis”, recuerda.

El llevar a vacunar a Jesús es complicado, dado que no tienen un carro lo suficientemente espacioso para llevarlo, es por eso que tienen que rentar una auriga para moverse al centro de vacunación, así como para regresar a casa, pero eso sale sobrando.

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“Es muy importante que se vacunen los niños y jóvenes, porque es una defensa que tenemos, que hace la vacuna, porque nosotros no nos pusimos graves, él fue el único porque no la tenía”, explica.

Al día son 500 dosis para rezagados, cuando Jesús llegó con sus padres, ya casi se terminaban las vacunas, de hecho, era seguro que no alcanzarían, dado que cuando preguntaron, el trabajador le comentó que quedaban tres dosis solamente, y había mucha gente delante esperando.

Pero los organizadores de la jornada fueron empáticos con ellos, saben lo complicado que es trasladar al pequeño, y les dieron la oportunidad de vacunarlo, a pesar que se habían acabado las dosis, Jesús es un caso de riesgo, así que debía protegerse lo más pronto posible.

“Ahorita se me vino el mundo encima porque solo quedaban tres vacunas para rezagados, pero la gente fue muy amable, y me dieron la oportunidad de vacunarlo a pesar de que ya no había, sobre todo por su condición, pero ya no había”, agradece.

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