Apenas ayer mencionábamos la importancia de que la Secretaría de las Mujeres contara con la fuerza para impactar en la vida de los sinaloenses y ayer mismo, la Semujeres anunció la clausura del bar que realizó una fiesta utilizando el feminicidio como decoración.
El anuncio, si usted quiere, es mínimo, apenas la cancelación de un bar dentro de una lucha que implica cambiar la cultura de la violencia machista, enquistada en la sociedad sinaloense desde hace décadas.
Sin embargo, como presentación de un instituto que está llamado a cambiar la vida de las mujeres en Sinaloa la podemos aplaudir, Tere Guerra, su titular comienza cumpliendo con varios de los requisitos que necesita un organismo que apenas va abriendo las alas.
Por un lado demuestra que quiere hacer algo, y que lo quiere hacer a la vista de todos, sin necesidad de andarse escondiendo tras sus oficinas, el objetivo es impactar a la sociedad y eso solo se puede hacer removiendo conciencias.
Otro de sus logros es la “transversalidad” que solicitó el Gobernador Rubén Rocha Moya y que consiste en que las acciones de una secretaría impacten en el resto de la administración mientras realiza una acción.
Y al solicitar la participación de diferentes organismos, incluido el Ayuntamiento de Culiacán, la Secretaría de Mujeres consiguió darle ese impacto a sus acciones, atravesando a otras áreas de Gobierno.
Y quizá el logro más importante de este tipo de acciones es el mensaje que se manda a las mujeres: ha llegado a Sinaloa un instituto que viene a defenderlas y que cuenta con el poder para hacerlo, algo que siempre había quedado en el intento, en el pasado.
Ahora falta lo más importante, que la Secretaría cuente con los recursos necesarios para hacer su trabajo, ya demostraron que quieren hacer cosas, ahora tienen que contar con todo lo necesario para conseguirlo.
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