Este miércoles, el Stasac o sea el sindicato de los trabajadores del Ayuntamiento de Culiacán se volvieron a agarrar a golpes en una asamblea, no les fue suficiente el desmadre que armaron el día de la elección el año pasado.

    ¿Se verán las caras?

    No sabemos si Héctor Melesio Cuén Ojeda merece que le den otro puesto al Partido Sinaloense en el gabinete de primer nivel o si es premio de consolación al saber que su archienemiga, Teresa Guerra Ochoa, está más que contemplada para ocupar un cargo de nueva creación en el que estarán al mismo nivel.

    Es que a Cuén Ojeda le han ganado las emociones y mientras no se resuelva la demanda por supuesto daño moral de parte de Tere Guerra hacia él, seguirá con ese sentimiento, mientras que la abogada y activista siempre ha estado a la altura de un puesto de esa magnitud, por su trayectoria como defensora de mujeres.

    Lo que empezó con declaraciones por parte del dirigente del PAS diciendo que no le importaban los cargos, terminó auto vanagloriándose diciendo en qué secretarías lo pueden poner al frente.

    Por mencionar algunas, dijo que se siente calificado para ejercer las secretarías de salud, educación, deporte y alguna empresarial.

    Casi se echó la mitad de los puestos en una declaración y si lo dejaban seguir hablando, seguramente terminaba diciendo que hasta la Gubernatura le quedaba chica.

    Además dejó entrever que el poder no recae al final en Rubén Rocha Moya, pues enfrente de él señaló que serían Morena y PAS quienes gobernarán Sinaloa en la siguiente administración.

    No, Morena, que quede claro, ambos partidos, y nadie, ni el Gobernador electo, refutaron eso.

    Buenas intenciones

    El experimento del que el Ayuntamiento de Culiacán ya dijo que eso es, un experimento, en el crucero de Ciudades Hermanas y Álvaro Obregón, parece que tardará más de lo esperado, debido a las grandes dudas que dejó.

    Preferimos hablar con las dudas por delante, debido a que la propia Comuna ha comunicado que ellos también las tienen, que prácticamente andan a tientas y ciegas, viendo cómo es que pudiera funcionar mejor o menos peor.

    Sabemos que ese punto es uno de los que jamás se imaginaron, los que lo crearon, que se convertiría en un problemón para la movilidad de la ciudad.

    Para nadie es un secreto o un misterio el por qué ahí hay un desmadre a la hora pico, y en las horas bajas también, debido a que hay mucho conductor que pierde la paciencia y hay otros que se la pegan de vivos, y buscan cómo meterse a la fila desde el cuarto o quinto carril, para alcanzar a pasar el semáforo en rojo a una zona en donde hay sólo dos carriles.

    Insistimos, nada nuevo, porque el principal problema no es cuando la gente circula de oriente a poniente o viceversa, ni siquiera para quienes vienen del sur y son obligados ya a dar vuelta a la derecha o izquierda después de que la principal arteria se quedó con un solo carril, de norte a sur, sino circular en ese sentido precisamente, de norte a sur.

    ¿Qué harán? Por lo menos ya se dieron cuenta de la importancia del paso de cebra, de modificar la coordinación del semáforo y de hacerle una extensión del semáforo a la izquierda, y todavía falta que instalen postes para que los vehículos no invadan espacios que no les corresponden.

    Esperemos la verdad que esto funcione bien y que tengamos un desenlace, un resultado a la altura de nuestra ciudad.

    Se pusieron buenas
    las fritangas

    Los sindicatos son toda una joya del mitote. Para ser afiliado tienes que saber boxeo, muay tai o de perdida aprender a aguantar los madrazos porque en todos hay.

    Este miércoles, el Stasac o sea el sindicato de los trabajadores del Ayuntamiento de Culiacán se volvieron a agarrar a golpes en una asamblea, no les fue suficiente el desmadre que armaron el día de la elección el año pasado.

    Ahora el motivo del combate fue una acción muy “hitleriana”, por parte de Julio Duarte, que es el líder sindical, para expulsar a Vladimir Osuna y Marlene Quintero que estuvieron con él a capa y espada en la elección pasada.

    ¿Por qué? Pues se le voltearon y ahora andan acarreando gente para Morena, lo que ya quedó documentado en manifestaciones encabezadas por Vladimir, según él a nombre de los trabajadores pero de la que Julio estuvo ausente.

    Veremos en qué acaba este capítulo del Stasac donde, tenga por seguro, el que más lo está disfrutando es David Alarid que hasta palomitas se ha de haber preparado para ver el box.

    Pena ajena dan estos sindicalizados que no pueden llevar sus cosas con civilidad, que se pusieron a echarse con todo y de las palabrotas pasaron a los golpes.

    No tienen para cuándo

    A varios días de haberse dado por iniciado el ciclo escolar presencial en Sinaloa, las autoridades encargadas no han cumplido con el rescate de las escuelas, dice el Secretario general del SNTE 53, José Fernando Sandoval Angulo.

    Aunque destacó las acciones que se han realizado por el Secretario de Educación, Juan Alfonso Mejía López, dijo esto no es suficiente. Ya que no se necesitan solamente mobiliario e insumos sanitarios, sino las condiciones de los servicios que deben tener los planteles educativos.

    El líder sindical anda diciendo que el ISIFE no nada más se tiene que enfocar en realizar dictámenes y detectar las problemáticas que se tienen en las escuelas, sino también dar soluciones.

    Ya que de seguir así, aunque se tengan avances en los cambios de color de riesgo epidémico, no se cumplen con todas las variables para un retorno seguro.

    Lo que parece seguro, es que los maestros se la han pasado inventando pretextos para no regresar a las aulas.

    Exhibida

    Los que se aventaron una buena puntada son los de la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Mazatlán con la noticia de que ahora tendrán dos tipos de recibos para los usuarios.

    Uno será el clásico recibo azul para los que se encuentran al corriente en sus pagos y ahora uno en color rojo para los que tengan un adeudo o estén a punto de sufrir la suspensión del servicio.

    Ahora sí se va a enterar el barrio entero que doña Chonita o don Gabriel deben el agua porque el recibo del agua le contará el chisme a todos los vecinos.

    La pregunta que se nos hace pertinente en medio de todo esto es ¿de qué color le hacemos los usuarios un recibo a la Jumapam por el pésimo servicio que presta a los usuarios un día sí y otro también?

    Resulta que ya les construyeron la Presa Picachos, el Acueducto Miravalles y la Planta Potabilizadora Los Horcones y el servicio sigue siendo tan deficiente como cuando sacaban el agua de los pozos construidos al margen del Río Presidio.

    Se rompe cualquier tubería y media ciudad se queda sin agua, pasa un huracán y toda la ciudad sufre de sed, se les ocurre hacer cualquier reparación de mantenimiento y ahí vamos otra vez a andar comprando pipas para llenar los aljibes.

    Y lo peor de todo es que el Alcalde Luis Guillermo “El Químico” Benítez anda recibiendo premios por “gestión del agua”, háganos el favor.

    A Mazatlán le urge una junta municipal del agua acorde a su nivel de gran destino turístico y no una caja chica de los políticos de medio pelo, que en lugar de dar un buen servicio se dedican a poner parches a lo largo de la vieja tubería de la ciudad.

    El tesoro que

    todos quieren

    Una de las luchas que se vienen es la del control de los millones de pesos que representa el Impuesto al Hospedaje en Sinaloa y que se utiliza para promocionar los diferentes destinos turísticos del estado.

    La historia del Impuesto al Hospedaje en Sinaloa es muy interesante, ya que fue uno de los primeros estados que lo implementó y que después se convirtió en uno de los métodos más eficaces de todos los destinos turísticos en México para recaudar recursos.

    El método es muy sencillo, el impuesto se aplica a los turistas a la hora de pagar la renta de una habitación y los hoteleros entregan ese dinero al Gobierno del Estado.

    En Mazatlán, durante muchos años, ese dinero lo controlaron los hoteleros, ellos decidían cómo y dónde aplicar esos recursos, que son más de 120 millones de pesos al año, aunque la pandemia los ha reducido drásticamente.

    Los hoteleros no tenían el dinero en sus manos, pero indicaban a dónde se iba ese dinero y el Gobierno del Estado lo aplicaba.

    El método funcionó correctamente durante años, aún y cuando llegó el Gobernador Quirino Ordaz Coppel y le quitó el control de esos recursos a los hoteleros.

    A pesar del cambio en el control de los recursos, la promoción continuó más o menos igual, ya que Ordaz Coppel conocía perfectamente cómo se debería de utilizar ese dinero para la promoción de los destinos, sobre todo Mazatlán.

    Sin embargo, ahora con la llegada de Rubén Rocha Moya al poder las cosas pueden cambiar drásticamente.

    Para empezar ya andan varios grupos interesados en darle una “mordida” a esos recursos, algo que no es nuevo, durante años los hoteleros los han defendido con uñas y dientes.

    El asunto que hay que seguir con cuidado es si Rocha Moya va a ser capaz de ejercer él mismo el control y destino de esos recursos o si las numerosas “hienas” que rondan esos dineros van a conseguir arrebatárselo.

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