"19 de septiembre"

El día de antier se cumplió un año del terremoto del 2017 y 33 del terremoto de 1985, ambos en la hoy Ciudad de México, del ocurrido en 1985 no tengo recuerdo más allá de videos y testimonios que me tocó escuchar, por cuestiones laborales viví un tiempo en la CDMX y me tocó conocer la historia de una ex compañera de trabajo que recién casada y viviendo con su madre. Su marido se sintió mal y pidió el día, ella haría lo mismo para quedarse con su marido enfermo, pero por insistencia de su madre no lo hizo y se fue a trabajar quedándose su madre a cuidarlo, sería la última vez que los viera, ya que horas después su casa caería en el temblor de 1985 perdiendo la vida ambos. En este caso ¿qué se puede decir?, ¿qué se puede hacer?, se podrá decir algo como: “designios de la vida”, “cosas que pasan”, “la vida no es justa” y quizá se pueda encontrar algo de confort dentro de cada una de esas frases.

 

Adelantémonos a 2017, al mismo 19 de septiembre y ocurre nuevamente un temblor, nuevamente pérdidas humanas, pérdidas materiales, familias incompletas así sin avisar sin oportunidad de decir adiós, nace nuevamente la gran solidaridad de nuestros connacionales, personas apoyando físicamente en donde se necesitaba, brindando apoyo, cada quien dentro de sus posibilidades y capacidades, no sé si Usted recuerde a aquellos héroes que surgieron esa noche, por mencionar a algunos a don Roberto González Pulido, quien con 89 años acudió a la Cruz Roja a apoyar como voluntario y su imagen se viralizó e inspiró a cientos por no decir miles, la Taquería Álvaro Obregón (cuyo dueño es extranjero) regalando sus tacos a voluntarios, recuerdo ver en redes sociales a Materiales del Parque, una ferretería que se encuentra en la colonia Condesa, que donó todo su inventario, imposible no mencionar al Ejército, siempre apoyando en este tipo de eventos y cómo olvidar a Frida, la perra labrador entrenada por la Marina para ser rescatista que no dejaba de buscar gente entre los escombros, rescatando a más de 52 personas, pero no sólo las personas de la Ciudad de México se unieron, también los que estamos lejos, en provincia apoyando mediante donativos o enviando víveres, sociedad unida buscando apoyar al que lo necesitaba, gran lección de civismo.

 

Quisiera decir que solo eso fue lo que provocaron los movimientos telúricos de ese día, pero no fue así, también destapó algo que se necesita señalar y no dejar de hacerlo, la corrupción, que recordemos no sucede así de la nada, siempre tiene que haber alguien que proponga realizar un acto corrupto y alguien que lo acepte, y en este caso se destapó algo que una frase como “designio de la vida”, “cosas que pasan”, “la vida no es justa” no logra acallar, los 19 niños y siete adultos que murieron dentro del Colegio Rébsamen, las autoridades (no es necesario señalar colores o sabores) corruptas y la persona o personas que manejaban el Colegio Rébsamen y sabían (tenían que saberlo) que las construcciones realizadas dentro de ese Colegio no eran seguras, si por alguna razón desconoce la historia se la resumo de manera breve, se autorizó en 1983 que en el predio en el que estaba ubicado ese Colegio se construyera una escuela, posteriormente se amplió la escuela pero esta ampliación no fue autorizada, y en el 2010 se ordenó “la clausura total temporal en los trabajos de construcción”, en el 2014 nuevamente se ordenó clausura, adelantémonos a 2017 y una multa de 21 mil pesos y tenemos una escuela que opera con los niveles de kínder, primaria y secundaria que colapsa y las autoridades echándose la bolita unas a otras.

 

¿Qué es justicia? Según Ulpiano es la voluntad firme y reiterada de dar a cada uno lo suyo, según la Real Academia Española es un principio moral que lleva a dar a cada uno lo que le corresponde o pertenece, como padre de tres niños le puedo decir que ninguno de los padres que perdieron a sus hijos en el Colegio Rébsamen encontrarán justicia, y esto por decir lo menos debe de preocuparnos a todos.

 

No hay manera de terminar esta colaboración sin pedirle a Usted amable lector, que si piensa en “dar una mordida”, “agilizar un trámite en gobierno”, en fin, realizar alguna acción que pueda propiciar la corrupción, piense en esos padres y entienda que la corrupción mata, cuanto más pronto lo entendamos mejor.

 

PD 1. Note como no existe palabra en nuestro idioma para señalar a un padre

que ha perdido un hijo, si pierdes a tu pareja (estando casado), eres viudo, si

pierdes a tu madre o padre eres huérfano de padre o madre según el caso, si eres

casado y te divorcias pasas a ser soltero, pero si pierdes un hijo no dejas de ser

padre, una vez padre siempre padre.

 

PD 2. Desde este espacio y sin que existan palabras se recuerda a Pao,

Valentina, Paquito, Gus, Daniela Itzel, Óscar André, Daniela Ramírez, Diego,

Fernanda, Eduardo, Santí, José Eduardo, Moni, Eileen, Karlita, Aned, Alexis,

Joshua y Alejandra.

 

PD 3. ¡Fuerza Sinaloa! Juntos saldremos de esto.