"Clinton, crecimiento y deuda pública vs crecimiento de México"

epalaublanco@yahoo.com.mx

El 20 de enero de 1993 el candidato demócrata William Clinton toma posesión como Presidente de los Estados Unidos. Desde su campaña había insistido en que sería un presidente diferente. Él se identificaba como el presidente del cambio, ofrecía en campaña que eliminaría el déficit fiscal, invertiría en salud y educación. Estos dos fueron bloqueados por un congreso republicano.

Clinton ofreció eliminar el déficit fiscal del gobierno de ese país, pero le llevó más de cuatro años conseguirlo. No resultaba fácil para un presidente que quería eliminar los déficits fiscales al preparar su presupuesto de gasto.

En 1994 redujo el déficit a 3.47 por ciento, el cual se fue reduciendo cada año; en 1997 se redujo a un 0.77 por ciento. Le llevó 4 años, todo su primer período presidencial, para cumplir su promesa de campaña. Para 1998, se logra así el primer superávit desde 1960, que el New York Times consideró la eliminación del déficit fiscal como el equivalente de la caída del Muro de Berlín. Cuando menos desde 1980 son los únicos años con superávit. Con ese superávit logró reducir la deuda pública de EU de 47.8 por ciento del PIB en 1993 a 31.4 por ciento del PIB en 2001.

A su llegada a Washington, tenía largas sesiones de más de 4 horas con sus consejeros, para analizar y discutir el tema de la economía y la estrategia para reducir su déficit; seguramente el problema de la reducción del presupuesto implicaba un gran esfuerzo, para lograr un presupuesto equilibrado. Las relaciones con el Congreso fueron difíciles; el primer año no logró que el Congreso le aceptara todo su paquete de estímulos a la economía, otro tema muy importante para su presidencia.

Clinton enfocaba su mensaje a temas que importaban más a los ciudadanos, como el desarrolo económico, la educación y el cuidado médico; todo envuelto en una imagen de cambio.

Clinton fue el campeón del crecimiento del Producto Interno Bruto con un crecimiento de 4.45 por ciento anual promedio del periodo de 8 años; el segundo más alto fue el de Ronald Reagan con un 4.38 por ciento anual promedio. Bastante cercano al de Clinton, pero con un programa económico muy diferente basado en la teoría de la escuela de Chicago de Milton Friedman. México tuvo un patrón muy inestable, México en el 95 con una caída de -6.29 por ciento y USA con 2.68 por ciento. En el año 1996 con un mayor crecimiento en México de 6.75 por ciento contra EU de 4.45 por ciento; en 1999 México tuvo un bajo crecimiento de 2.75 por ciento versus EU con un 4.75 por ciento.

Reagan incrementó su deuda pública en 1,860 billones de dólares, pero el crecimiento de la economía no fue suficiente para compensar su excesivo gasto militar que emprendió y los recortes de impuestos a los más ricos, al estilo de Donald Trump. La deuda de Reagan fue la más alta, solo superada por la deuda generada por Franklin D. Roosevelt en la gran depresión en 1929, que claramente se justificaba; y Wodrow Wilson. Trump va por el mismo camino.

Clinton propuso un paquete de estímulos con 30,000 millones de dólares en su primer año de gobierno, pero fue bloqueado y nunca pudo aprobarse en todo su periodo presidencial.

El TLCAN se acordó negociarlo el 10 de junio de 1990. Y las negociaciones iniciaron el 5 de febrero de 1991. Fue firmado por los tres jefes de estado: Brian Mulroney de Canadá, George H. W. Bush y Carlos Salinas de Gortari en el mes de diciembre de 1992. Pero no fue ratificado hasta que entró Clinton como Presidente en 1993, pues exigió la firma de acuerdos paralelos atendiendo el tema laboral, que se denominó “Acuerdo de Cooperación Laboral de América del Norte” (ACLAN), y otro acuerdo ambiental. El TLCAN entró en vigencia el 1 de enero de 1994.

Para su ratificación Clinton tuvo que cabildearlo con su Congreso implicando un serio esfuerzo de cabildeo de su parte, por eso él lo considera como parte de sus logros. De hecho, este cabildeo implicó un terrible desgaste para los representantes, encargados del contacto con el Congreso.

Además del desgaste con el Congreso y a pesar de ya estar negociado por Bush, tuvo que hacer nuevas concesiones, ante la insistente presión de los productores de hortalizas de Florida que afirmaban que podría haber incrementos importantes de exportaciones de tomates, pepinos y chiles bell que inundarían el mercado americano y que no los podían contentar. Los tratos que hacían con Florida eran después olvidados y continuaban con su desacuerdo, que todavía hasta la fecha continua
Otra demanda de los productores de caña de azúcar y remolacha o betabel de Minesotta, North Dakota y otros estados era poner un límite a las importaciones de azúcar para evitar las inundaciones de importaciones de estos productos.

Clinton planeó hacer grandes cambios al programa anterior de bienestar que otorgaba ayudas a familias de bajos ingresos con niños, porque consideraba que este programa inadvertidamente tenía atrapadas a muchas familias pobres en un ciclo de pobreza. Pretendía cambiarlo por entrenamiento en el trabajo y programas de guarderías. Pero la mayoría republicana se lo bloqueó.

Clinton consiguió en la economía americana un período de baja inflación y bajo desempleo. Promovió un paquete de estímulo en su primer año de gobierno, pero fue también bloqueado por los senadores republicanos. El ingreso mediano (mediana estadística) creció de 38,262 dólares en 1995 a 42,151 dólares. Para el 2000 la tasa de desempleo llegó a 4 por ciento y los pobres habían disminuido a 11.3 por ciento de la población.

Para el final de su presidencia, los números eran impresionantes con la más larga historia de expansión en Estados Unidos, con superávit fiscal en los últimos años de su periodo y la tasa de desempleo más baja. Dejó la Casa Blanca con una aprobación del 73 por ciento.