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"En Tribunales"

"Cómo defender mi colonia"

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    david@bufetealvarez.com



    Si usted es un vecino de una colonia que está siendo invadida por la construcción de departamentos y se siente impotente, sin que lo siguiente implique que pueda hacerlo sin asesoría de un buen abogado, ahí le van algunas recomendaciones:
    Revise cual es el uso de suelo permitido para su colonia.
    Verifique que el uso de suelo coincida con lo que esta viendo que quieren construir en su colonia.
    En cuanto vea una nueva construcción de departamentos, solicite información pública sobre posibles permisos y licencias otorgadas. Se sorprenderá al saber que muchas obras de este tipo inician sin contar con los permisos y licencias correspondientes.
    Cuando tenga en su poder los documentos y la información que le entreguen como respuesta a su solicitud, verifique que lo que esta viendo que se construye, coincida con los permisos.
    Por ejemplo, en algunas colonias (Lomas de Mazatlán, Gaviotas, El Dorado, Sábalo Country), la ley exige tres cajones de estacionamiento por cada departamento que se construya en terrenos mayores a 250 metros cuadrados y ¡Oh sorpresa! El 95% de los edificios no respeta ese número mínimo.
    Si se da cuenta que lo que dicen los permisos y licencias no corresponde con lo que realmente están construyendo, busque a la unión de colonos (en caso de existir), para que estén enterados y en su caso lo apoyen. Algunas uniones de colonos están bien organizadas y tienen experiencia sobre qué hacer con este tipo de irregularidades.
    Si nota irregularidades, recabe pruebas, tome fotografías y videos. 
    El camino normal es acudir a la Dirección de Planeación y Desarrollo Urbano Sustentable a denunciar las irregularidades. Le recomiendo agotarlo porque hay desarrolladores con verdadera conciencia social que se preocupan seriamente porque sus edificios no violen la ley y no causen molestias a los vecinos y seguramente al darse cuenta de que están haciendo las cosas mal, ajustarán sus proyectos al marco legal.
    Si después de un par de semanas se da cuenta que no le van a resolver el problema en la Dirección de Planeación o se topó con un desarrollador inconsciente y acostumbrado a violar la ley, no tenga miedo de acudir a los tribunales.
    Si decide acudir a los tribunales es muy importante que busque asesoría de un abogado competente y honesto.
    Según los expertos, a Mazatlán le quedan al menos ocho años del boom inmobiliario por lo que todos debemos apoyarlo para que la derrama económica beneficie a los mazatlecos, pero eso no quiere decir que tengamos que permitir que se viole la ley. Si nos cruzamos de brazos y no hacemos nada, el tiempo nos cobrará la factura cuando colapsen los servicios básicos o pase algo peor.
    Nada nos cuesta y mucho ganamos si todos los involucrados en este tema del desarrollo urbano, ciudadanos, vecinos, empresarios y autoridades, trabajamos en equipo teniendo como guía que se respete y aplique la ley y, si hay que hacerle ajustes por ser obsoleta, pues a trabajar en hacerlos para contar con un mejor marco legal.
    El fin de la ley es facilitar la convivencia entre los ciudadanos y no generar conflictos, pero para que ese fin se cumpla, hay que tener buenas leyes y, sobre todo, buenos ciudadanos y buenas autoridades. 

     

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