"De colchones y cosas peores"

Estimado lector, esta columna estaba dirigida a continuar el tema de “Los jueces”, pero entre tantos colchones llenos de basura me fue imposible no escribir acerca de estos, pero se volverá a tocar el tema de los jueces en este espacio.

 

Antes trataré de hacer un pequeño recuento de lo ocurrido en el mes de septiembre ya que aún está fresca en nuestra memoria y en el sentir ciudadano las lluvias que azotaron nuestra entidad el pasado mes, derivadas de la tormenta tropical 19-E, provocando afectaciones en 11 municipios de la entidad.

 

En aras de justicia es importante recordar las enormes muestras de apoyo que se dieron entre la misma ciudadanía que acudió rápidamente al auxilio de sus conciudadanos. Todos apoyando dentro de sus capacidades, se donaron artículos de limpieza, comida, colchones, estufas, materiales médicos, así como mano de obra para limpieza de casas y colonias. La situación fue difícil, hubo colonias en donde se dieron enormes pérdidas materiales, familias que todavía se encuentran enfrentando una situación económica complicada y lamentablemente también hubo pérdidas humanas. Andrea, Carmen y doña Rosa, tres vecinas de la Colonia 6 de Enero que fueron arrastradas por la corriente. Los cuerpos de Carmen y de doña Rosa siguen sin aparecer y por lo tanto sus familiares sin poder descansar, la autoridad no puede darse el lujo de no encontrar dichos cuerpos.

 

El actuar del gobierno por otro lado no fue lo esperado, Protección Civil y la Secretaría de Educación Publica y Cultura se acusaron mutuamente, el primero le decía que podría haber suspendido clases, y el segundo le contestaba que jamás le informó que fuese necesaria dicha suspensión. ¿Qué consecuencias hubo? Económicas y humanas ya las sabemos, tenemos un nuevo Secretario de Educación Pública y Cultura y el titular de Protección Civil acudió a una comparecencia al Congreso del Estado, pero esta fue el último día de sesiones, así que fueron muchos los ausentes y el titular, al parecer, salió bien librado.

 

Parecía que así quedaban las cosas y se volvía a la normalidad (dentro de lo que cabe para todos aquellos afectados) pero esta semana dentro de los “apoyos” que dio Gobierno del Estado, se entregaron colchones, sin lugar a dudas muy necesarios para aquellas familias que no contaban con ellos y ayudarían a que las personas obtuvieran un merecido descanso, pero estos colchones estaban en mal estado, desprendían un mal olor, al abrirlos se descubrió que se encontraban llenos de basura, algunos con sangre, otros con orina, animales, en fin, colchones que de ninguna manera deben de ser utilizados por persona alguna.

 

La primera reacción del gobierno fue decir que esos colchones habían sido donados y que gobierno solamente se encontraba distribuyéndolos, posteriormente aceptaron que habían sido adquiridos por ellos y que el proveedor falló pero que se actuaría en contra del mismo y cuyo nombre no proporcionaban para no afectar la investigación que pudiera derivarse de esta situación. 

 

La autoridad debe responder y hacerlo enérgicamente, no se puede esperar a “que se aplique la ley”, se nos tiene que responder sobre la elección de ese proveedor. ¿Cuál fue el precio? ¿Quién recibió dichos colchones? ¿En dónde se almacenaron? ¿Quién los revisó? ¿Quién supervisó dicho almacenamiento y revisión? Entre otras dudas que definitivamente puedan surgir.

 

En redes sociales y diversos medios se mencionaba que el responsable es un trabajador de la Secretaría de Desarrollo Social, cuyo nombre tampoco quieren proporcionar, y en este espacio no queríamos ingresar ese dato por no estar verificado, pero el padre del supuesto trabajador responsable de la compra de dichos colchones dio una conferencia de prensa donde decía que su hijo no era responsable de nada, que el culpable era Isabel Reyes Villanueva, quien fue el proveedor contratado para proporcionarlos. 

 

Una vez más nuestro Gobierno del Estado está ante una oportunidad, la de escuchar a la ciudadanía y esclarecer lo ocurrido, ya que como sociedad no podemos dejar pasar este suceso sin que se nos den respuestas y se dé castigo a los responsables, pues la impunidad es algo que no debemos de tolerar.

 

PD 1. El título de esta colaboración está inspirada en el de las columnas de Germán Dehesa, las cuales se extrañan ampliamente.

 

PD 2. Aun no entra en funciones y ya quiere violar la Ley, ¿Quién es? La próxima semana le digo.