"Gobernar y decidir: entre el autoritarismo y la gobernanza"

¿Cómo se toman las decisiones en los gobiernos? ¿A qué procesos de análisis, reflexión y pensamiento se someten las decisiones que toman las autoridades? ¿Existen algún método que se utilice para decidir asuntos de carácter público en los gobiernos de Sinaloa?

 

Estas son algunas de las preguntas que se plantean de manera frecuente cuando los gobernantes toman decisiones que afectan o amenazan los intereses colectivos de una sociedad. La toma de decisiones es un tema que ha sido estudiado con diferentes enfoques y teorías para comprender y mejorar el ejercicio de gobierno en la toma de decisiones. También se han planteado diferentes métodos para hacer más participativas y democráticas las decisiones, entre ellos están los consejos ciudadanos, el cabildo abierto, los foros de consulta, comités de planeación, plebiscitos, encuestas, comités de vecinos entre otros. Sin embargo, dentro de las atribuciones de cada titular, ya sea de un gobierno o de una institución pública, la sociedad se enfrenta a decisiones que no siempre resultan a su favor, como aquellas que usualmente obedecen a intereses políticos y económicos, así como de otras de carácter psicológico que tienen que ver con los valores de la persona, su formación, inseguridades, complejos de superioridad, personalidades despóticas, intolerantes y demás, que influyen en las decisiones y a las que por su origen, resultan verdaderos problemas y obstáculos para el buen desempeño de los gobiernos.

 

De ahí que a partir de estos elementos, podemos ubicar si las decisiones que se toman surgen de actitudes autoritarias o no. Lo contrario al autoritarismo sería que los gobiernos tanto municipales con estatal, alcanzaran los niveles de la gobernanza, entendido este concepto como el acto de gobernar con gobernantes y gobernados, en el que las interacciones y acuerdos generen oportunidades y soluciones a problemas sociales donde la ciudadanía participa en la toma de decisiones. Todo lo contrario al autoritarismo, gobernanza es una suma de gobierno y confianza.

 

Como podemos observar, estos dos conceptos se hacen presentes en la forma o manera de decidir de nuestros gobernantes, sobre todo en las que están reglamentadas por alguna disposición legal. Pero cotidianamente observamos, cómo se toman decisiones en las que intervienen y predominan razones de carácter personal anteponiendo el bienestar colectivo.

 

Si analizamos en nuestra entidad, podemos tomar algunos ejemplos en los que se evidencian decisiones poco afortunadas, en este caso el Gobierno del Estado y el Ayuntamiento de Culiacán. En el primero, se dio a conocer por Noroeste que en el ámbito de la cultura, el Gobierno del Estado gastó 22 millones de pesos en la presentación de grupos populares que no requieren, ni promoción ni difusión, por ser del ámbito comercial y del espectáculo. En contraste con esta decisión de implementar actividades festivas, el Instituto Sinaloense de Cultura carga con una deuda de 26 millones con sus proveedores, artistas y empleados, quienes involuntariamente han resultado ser quienes han sostenido la agenda cultural de este organismo. La pregunta que debemos plantearnos va más allá de su situación financiera, tendría que estar enfocada en conocer cuáles son los criterios de política cultural que se consideraron para decidir la pertinencia de invertir una suma tan considerable en la presentación de grupos como Timbiriche, Los Ángeles Azules y Banda MS, que ya se encuentran en el circuito comercial en lugar de fortalecer los programas y festivales propios de este instituto.

 

Otro caso de análisis podría ser la remodelación del Centro de Ciencias, que prácticamente fue demolido por completo para construir un nuevo Centro de Ciencias en el mismo sitio, en lugar de edificarlo en otro sector de la ciudad y contar con dos recintos dedicados a la divulgación de la ciencia para beneficio de diferentes sectores de la ciudad. 

 

Un ejemplo más que pone de manifiesto una particular manera de toma de decisiones,  sucede con el Alcalde Estrada Ferreiro al decidir suspender los apoyos al Jardín Botánico, en una clara confrontación con la Sociedad Botánica y Zoológica de Sinaloa, quienes han administrado el lugar desde 1986. La pregunta aquí es la misma: ¿qué criterios se han establecido para decidir si se apoya o no con dinero público a un lugar, cuyas principales funciones son la conservación de la flora y fauna, la investigación científica, la educación ambiental y la promoción de la cultura? 

 

Es evidente que los criterios son mínimos, pues con decisiones como ésta, argumentadas por la descalificación, la falta de diálogo y de conocimientos que les permitan valorar lo que el Jardín Botánico representa como espacio público, inhiben la iniciativa y el esfuerzo conjunto entre gobierno y sociedad, además provocar la pérdida de la confianza y deteriorar la participación ciudadana. 

 

Sin duda la toma de decisiones es la acción que determina no sólo el destino de las políticas gubernamentales, sino el ejercicio de un gobierno democrático y sus niveles de participación con la sociedad. Por ello la importancia del previo análisis del costo-beneficio en cada decisión.

 

Muchas veces las decisiones mal tomadas que acarrean costos mayores a los beneficios, obedece, por una parte, a la falta de una agenda de gobierno estructurada que les permita ver con mayor claridad su función como titulares del gobierno estatal o municipal, pero por la otra, las decisiones de carácter subjetivo-emocionales, complican aún más el escenario y el daño social es mucho mayor. 

 

Las expresiones con evidencias de autoritarismo y la simulación de la gobernanza, reviven la necesidad de poner a revisión toda la estructura formal de participación y consulta ciudadana, pues está claro que no han funcionado del todo y se han vuelto espacios fantasmas, que sólo han servido para dar aparente legitimidad y cumplir con los protocolos y la reglamentación, en un afán por presentar públicamente prácticas de falsa gobernanza y ocultar decisiones autoritarias. 

 

Hasta aquí mi opinión, los espero en este mismo espacio el próximo viernes.

 

vraldapa@gmail.com